Es su lugar en el mundo, más allá que desde muy chico hizo su vida en Barcelona. Por eso, apenas terminó el clásico catalán ante el Espanyol, donde en otra brillante actuación colaboró con un golazo para la goleada por 4 a 1 del equipo “culé”, Lionel Messi voló en vuelo privado a Rosario, donde llegó para pasar Navidad con los suyos.
Messi rumbo a Rosario
Apenas aterrizó, “La Pulga”, quien viajó acompañado por su hermano, Rodrigo, y sus sobrinos, se subió a una camioneta en el aeropuerto y partió raudamente al encuentro de su mujer, Antonella Rocuzzo, y sus hijos Thiago y Mateo, quienes ya habían viajado el día anterior.
Fiel a su costumbre, el crack argentino aprovechará las mini vacaciones que el técnico Luis Enrique les dio a él, a Luis Suárez y Neymar -los sudamericanos del plantel- para pasar la Navidad en “sus pagos”.
Mientras tanto, aún resuenan los ecos por su brillante actuación en el “derby”, que incluso despertaron las críticas contra France Football, la publicación francesa que anualmente entrega el Balón de Oro y este año eligió a Cristiano Ronaldo.