03 Octubre de 2018 08:00
El viernes por la madrugada, mientras un grupo de gente realizaba un escrache en la puerta de su casa, Carolina se enteró de lo peor: su hijo de 19 años, Tomás Bustos, había abusado de una nena de diez en la ciudad jujeña de El Carmen. Sin dudarlo, la mujer lo entregó a la Policía y luego realizó un doloroso descargo en redes.
“Estoy haciendo este video con la ayuda de mis hijas. No me siento bien. Estoy medicada. Por eso escribí algo”, fue el arranque del video de tres minutos que publicó en su cuenta de Facebook. A continuación, la mujer prosiguió a leerle una carta a la comunidad.
La mamá del violador lo entregó y le pidió disculpas a la familia de la víctima.
“Repudio el acto malicioso y el ataque realizado por mi hijo. Teniendo en cuenta la ferocidad de los ataques es que deseo hacer mi descargo ante toda la comunidad. En primer lugar, quiero hacer hincapié en que el día viernes a la madrugada, se aparecieron los familiares de la nena y, sin mediar palabra, atacaron ferozmente mi casa. Entre gritos escuché lo que hizo mi hijo. En cuanto llegó el personal policial, les dije que entraran a mi casa y que se lo llevaran”, destacó.
“Hoy, con gran dolor, debo decir que desconozco a mi hijo. Y no salgo del asombro de lo sucedido. Lamento en el alma y en lo más profundo de mi corazón. Les pido perdón y disculpa a la familia. Les pido perdón a todos. Quiero entender por qué el odio y la agresividad hacia mí. Si yo, con tanto odio y tristeza hacia mi hijo, lo entregué a la Policía”.
El violador era vecino de su víctima y la abusó en un descampado / Gentileza: Somos Jujuy.
La violación tuvo lugar el jueves 27 de sepriembre en un descampado de la ciudad. Bustos golpeó a la nena, la violó y luego la abandonó en el lugar. La víctima permanece internada con un grave cuadro. Él fue imputado por el delito de “abuso sexual con acceso carnal agravado por el daño a la salud pública o mental de la víctima y homicidio en grado de tentativa”.
“Mi hermano tiene un antecedente por intento de violación a un niño de ocho años. Esto ocurrió cuando él tenía 16. Nosotros no lo vamos a defender. Si el día de mañana la Justicia necesita un abogado para mi hermano, deberá designar un profesional del Estado. Mi hermano no se merece la ayuda de mi mamá, ni ella se merece pasar por todo esto por culpa de él”, anticipó una de las hermanas del agresor.