Tal como pronosticó el Servicio Metereológico Nacional, la tormenta llegó en el ocaso de la tarde, luego de una intensa jornada de calor. Un diluvio invadió la ciudad de Buenos Aires que con fuertes ráfagas obligó a los transeuntes a buscar reparo en lugares cerrados.
El ente climatológico prevé no sólo fuertes ráfagas de viento, sino también una ocasional caída de granizo e importantes actividad eléctrica.
En cuanto a las lluvias se estima que puedan acumularse unos 40 mm mientras duren las precipitaciones.
En las ciudades de la Costa Atlántica como Pinamar la lluvia también se replicó, dejando a los veraneantes sin playa.
Los paradores de Pinamar azotados por la tormenta.
Las playas se vaciaron con la llegada de la lluvia.
Recomendaciones
El Gobierno porteño emitió un alerta e instó a los vecino a tomar algunas precauciones:
No circular por calles anegadas.
No colocar elementos en ventanas o balcones que puedan ser arrastradas al vacío por acción del viento.
No manipular artefactos eléctricos que hayan estado en contacto con el agua.
No obstruir los sumideros, ni depositar residuos en la vía pública, en los horarios y lugares no autorizados.
Ante lluvias muy intensas, no sacar los residuos.
Evitar trasladarse en zonas arboladas cuando se presenten vientos fuertes.
No tocar columnas del alumbrado, cajas de luz, o cualquier tipo de cables en la vía pública.
Extremar las medidas de seguridad al conducir un vehículo. Recordar que la lluvia disminuye la visibilidad y que las distancias de frenado varían con respecto a las condiciones climáticas normales.
Circular a velocidad reducida y siempre con las luces de posición encendidas.
Según el Servicio Metereológico las condiciones mejorarán rápidamente de sur a norte durante la mañana del martes.