El pronóstico del tiempo ya anticipaba que no iba a ser un buen día en la Costa Atlántica, anunciando lluvias y tormentas para la mayor parte del día.
Sin embargo, la fuerza de la naturaleza superó todas las previsiones y tuvo una de sus mayores y devastadoras demostraciones en Pinamar, donde un parador fue literalmente destrozado por el viento.
Se trata de Riviera Beach, donde más de 50 carpas fueron destruidas y se rompió la mitad de las sillas y las mesas del lugar en apenas un minuto de contundencia demoledora.
“El guardavidas nos avisó. Decidimos empezar a apilar todo pero, cuando estábamos terminando, comenzaron las ráfagas de viento”, expresó Rodrigo, uno de los dueños.
El fuerte viento destrozó más de 50 carpas.
Los fuertes vientos provocaron que las sillas y mesas de plástico que volaron impactaran en algunos de los autos estacionados y terminaran aterrizando en el techo de las casas vecinas, pero afortunadamente no hubo que lamentar daños ni heridos.
El intendente, Martín Yeza, alertó por la formación de "trombas marinas".
El alerta por la formación de trombas marinas -un tornado en el mar, donde se genera un remolino que toca la tierra- motivó que el intendente de Pinamar, Martín Yeza, le pidiera a la población que no se mueva de sus casas.
Solicitamos a quienes estén en Pinamar que no salgan de sus casas. Hay trombas marinas y van a ir en aumento.
- Martín Yeza (@martinyeza)
“Nos habíamos preparado 72 horas antes y se anticipó a la población para que estuviera preparada”, expresó Oscar Villegas, de Defensa Civil. Además, explicó que el fenómeno climático “rebasó las expectativas por la cantidad de lluvia” y que “llevamos 80 milímetros acumulados desde las 12 de anoche”.
Vale recordar que Pinamar no fue el único lugar afectado, ya que Mar del Plata, Valeria del Mar y Villa Gesell -donde declararon la emergencia municipal- también sufrieron daños por la fuerte tormenta.