Las altas temperaturas debido a la ola de calor que azota el país volvieron a evidenciar el abandono en términos de infraestructura de los establecimientos educativos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), luego de que en la mañana del jueves explote una cámara de luz en la escuela Infantil N° 05/02°, lo que generó fuego, humo y derivó en el desalojo del predio donde cursan 240 niños y niñas.
"Era humo, pero empezaron a explotar las tomas de luz de la puerta del jardín, y vino la gente de Primaria para avisarnos. Y las mamás lloraban y golpeaban las puertas para que sacáramos a los más chiquitos", detalló, ante Radio 10, Cecilia, docente del jardín de infantes ubicado en la avenida Pueyrredón y Sarmiento, que es parte de la Escuela Nº 16 D. E. 2 Presidente Mitre. "Lo vivimos mal, para atrás. Hay maestras llorando todavía, de preocupación", agregó.
Al lugar se acercaron los Bomberos y 10 unidades del SAME, que debieron atender a una auxiliar que, si bien está fuera de peligro, se vio afectada por el humo y fue trasladada al Hospital Ramos Mejía, según informó el gremio de UTE.
"Sacamos a los chicos como pudimos, de la mano, en brazos, ¡son bebés los de dos años!", relató ante Argenzuela la maestra. "Veíamos que se prendían y se apagaban las luces, y ya venimos con problemas desde hace bastante tiempo en este jardín. Y es como que no lo solucionan, o lo solucionan hasta por ahí nomás. Me parece que las altas temperaturas y los aires acondicionados provocaron esto", aclaró Cecilia.
Las cajas que fallaron y se incendiaron están en la puerta del establecimiento, por lo que la salida por ese lugar se vio imposibilitada y los policías presenten debieron romper otro ingresos del costado para poder evacuar a todos por ahí. "Nos desesperamos cuando vimos que explotaba todo eso y largaba un montón de humo, por lo que no podíamos salir por esa puerta", contó la maestra.
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"Hicimos lo más rápido que pudimos, pero la gente corría por la calle agarrándonos los chicos y el miedo nuestro era que cualquiera pase y agarre un pibe, y no sea el padre. Hay algunos que están en zona, pero otros no", señaló la maestra, quien informó que en el establecimiento tienen entre 25 y 30 chicos por cada sala."Nos contuvo la gente. Y después fuimos a la Plaza Miserere a esperar con los chicos acá, con este calor", repasó Cecilia. "Todavía hay algunos chicos de sala de dos años, pero ya vinieron todos los padres desesperados a buscar a los nenes", agregó.
La maestra confesó que es muy difícil realizar su tarea educativa en las condiciones actuales. "Se corta la luz, falta el agua, no funcionan los baños, es un estado en el que no se puede estar con los chicos", explicó. "Fue terrible el calor. No podés llevar a los chicos al baño, están agolpados en la sala. Te morís cuando salís", añadió.
"Capaz que sí hay clases mañana, porque acá no les importa nada. Con tal de que haya clases y que sean la mayor cantidad de días, no les importa nada", se lamentó la docente. Ante la pregunta del conductor Jorge Rial sobre si se refería al Ministerio de Educación porteño, confirmó que sí. "Tanto que se preocupan por los chicos, se van a tener que preocupar por la falta de los chicos algún día, por si se muere alguno. Ese va a ser el problema. Que nos pase a alguno de nosotros", cuestionó la mujer.
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Igualmente, señaló que "el colegio está en buenas condiciones, más allá de problemas de pintura y humedad", y reveló el problema que sí vivieron el año pasado. "Ratas saltando arriba de los pibes. Saltaban. A la mañana nos encontrábamos con eso y vinieron a tapar los agujeros por donde podían entrar", contó. "Tienen el tamaño de un perro acá. A parte las escuchás correr, caminar", detalló.La docente también mencionó a sus compañeros Carla y Noelia, quienes también se abocaron a evacuar a los niños y las niñas lo más rápido posible. "Soy docente desde los 22 y tengo 49. Yo soy feliz con lo que hago, pero con esto que nos pasó hoy me preocupé mucho y lloramos mucho porque estábamos muy asustadas", expresó. "Para nosotros la prioridad son los chicos", concluyó.
24 horas antes, en el mismo barrio porteño, la escuela Manuel Quintana también fue evacuada por una presunta fuga de gas. Algo que finalmente se comprobó como falso y llevó a la conclusión de que los alumnos se descompusieron por las extremas temperaturas.
La campaña del Gobierno porteño por tener la mayor cantidad de días de cursada está chocando con la realidad que impone el clima. Pero además evidencia que a la hora del mantenimiento y la infraestructura de los establecimientos educativos, todavía quedan muchas cosas pendientes.