En la madrugada del domingo, un hombre ingresó al Hospital Oller de San Francisco Solano con un supuesto cuadro de angina de pecho que terminó con una complicación cardíaca que le provocó la muerte.
A raíz del hecho, y de manera insólita, los familiares y allegados de la persona fallecida se enfurecieron y destrozaron varios rincones del hospital, al mismo tiempo que agredieron a los médicos y enfermeros.
Familiares de un paciente fallecido agredieron a enfermeros y destrozaron el lugar.
Según explicó uno de los testigos, el hombre de 38 años ingresó al centro médico llevado por los bomberos, con un supuesto cuadro de paro cardiorrespiratorio, por lo que fue trasladado de inmediato y atendido por los médicos.
Sin embargo, alrededor de una hora después, uno de los doctores le informó a los familiares que el hombre había perdido al vida como consecuencia de un infarto, producto de una taquicardia.
En ese momento, cuando se enteraron de la mala noticia, los allegados se volvieron muy agresivos y comenzaron a culpar a los médicos por lo que había sucedido.
Los familiares destrozaron varios aparatos que se utilizaban en todo el hospital.
Enojados, empezaron a violentarse contra el médico de guardia, a quien hirieron gravemente, a la misma vez que provocaron grandes destrozos dentro del hospital, de donde huyeron tras robarse distintos medicamentos. El episodio, duró varias horas, ya que comenzó cerca de las doce de la noche del sábado y se extendió hasta las primeras horas de la mañana.
Los atacantes tiraban piedras y pateaban todo lo que había a su alrededor.
Gabriela, una enfermera del hospital, explicó en diálogo con Telefe que cuando dieron aviso de la muerte del paciente, "la mujer del hombre empezó a los gritos, y el hijo entró a las patadas", por lo que los médicos trataron de sacarlos afuera y trabaron la puerta de la sala de guardia para que no pudieran entrar.
"La patearon, la destrozaron y entraron a querer pegarnos. Corrieron al médico, mientras nos empujaban a nosotras. Le pegaron al chico de limpieza y rompieron todo", contó la mujer y agregó que además, los familiares se llevaron todos los psicofármacos que se utilizan para el cuidado de los pacientes.
Lo cierto, es que eso no fue todo, porque en medio de la furia, un hermano del paciente fallecido se descompuso, y tuvo que ser internado por las enfermeras ya que los médicos se habían ido a la comisaria a pedir ayuda policial.
Una enfermera del lugar sostuvo que no es la primera que pasa una cosa así.
"Nos amenazaban y decían que nos iban a prender fuego si no lo atendíamos", contó Gabriela conmocionada y agregó que en el momento que intentaron ingresar las nuevas enfermeras del turno mañana, quienes no sabían de la situación, los familiares les exigían que no lo hicieran porque sino "las iban a hacer boleta".
"No es la primera vez que vienen y nos pegan. Muchas veces ha pasado, nos gritan y maltratan. Siempre pasa que vienen, nos patean y nosotros los tenemos que atender porque somos amenazados", cerró la joven resignada.