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Tras haber sido rechazadas, dos hermanas necesitan ingresar de urgencia a San Luis a despedir a su padre con cáncer

A pesar de que el pedido fue realizado 10 veces y en todas las ocasiones negado, ahora la provincia aceptó su ingreso, pero luego deben hacer una semana estricta de cuarentena.

24 Agosto de 2020 18:01
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Dos hermanas que viven en la provincia de Tierra del Fuego, y a quienes le rechazaron en diez oportunidades la solicitud que presentaron, necesitan ingresar lo antes posible a San Luis, donde su papá de 61 años se encuentra con internación domiciliaria debido a que su salud está sumamente delicada por un cáncer de pulmón que se agravó en los últimos meses.

Ante esta situación, en las últimas horas desde la provincia aceptaron que ambas entren, aunque solo pueden hacerlo si tienen un test negativo de Covid-19 y si luego hacen una semana estricta de cuarentena en la Universidad de La Punta, algo que se niegan a realizar porque ya no tienen más tiempo para despedir a su padre.

Según contaron las chicas a diferentes medios, en abril durante un estudio de control le detectaron a su papá un cáncer avanzado, por lo que el hombre de 61 años pudo regresar a la localidad sanluiseña de Quines, donde ahora está con internación domiciliaria con cuidados paliativos.

Martín Garay tiene cáncer de pulmón con metástasis ósea, y a pesar de que lo diagnosticaron hace pocos meses, la enfermedad avanzó tan rápido que el 10 de agosto los oncólogos que lo tratan le informaron que ya no había más nada por hacer.

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Por eso mismo, las dos necesitan entrar cuanto antes a la provincia gobernada por Alberto José Rodríguez Saá, ya que no están seguras de cuánto tiempo más su papá podrá resistir consciente.

“A raíz del agravamiento de la enfermedad de mi papá gestioné la solicitud para salir de Tierra del Fuego y el gobernador Gustavo Melella nos otorgó el permiso 24 horas después. Pero la odisea comenzó cuando intenté hacer lo mismo para ingresar a San Luis”, contó Victoria al sitio Infobae.

A pesar de que aún cómo podrán resolver las cosas, las dos hermanas decidieron viajar igual, y ahora se encuentran en plena ruta en compañía de su sobrino de 5 años, a quien su papá pidió expresamente ver.

Aunque el recorrido es largo, porque tienen que hacer más de 3.000 kilómetros, planean llegan a San Luis el próximo miércoles, y esperan que para entonces no sea tarde.

Según contaron las hermanas, desde el 11 de agosto completaron "diez formularios" pidiendo que le concedan el permiso para ingresar a San Luis, pero todas las solicitudes fueron rechazadas.

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En la mayoría de los casos les explicaban que no podían entrar porque no tenían domicilio en la provincia, hasta que le sugirieron que inicien un formulario por tratamiento médico o intervención quirúrgica, el cual al poco tiempo fue rechazado porque la persona que tenía la patología no era la que viajaba.

En base a lo que las hermanas pudieron contar en diferentes medios, actualmente su papá ya casi no puede hablar, y no está en condiciones de comunicarse, por lo que necesitan poder verlo una vez más.

Ante los insistentes reclamos, el Gobierno de San Luis accedió en las últimas horas a que las hermanas y el menor de edad ingresen a la provincia, aunque para hacerlo deben contar con un test negativo de Covid-19, y además una vez dentro deben someterse a una cuarentena obligatoria de 7 días en la Universidad de La Punta, algo que las dos hermanas descartan porque no saben cuánto más aguantará su padre con vida.

La situación que está atravesando Garay es similar a la que vivió Pablo Muse, el hombre que viajó desde Neuquén hacia Córdoba para ver a su hija Solange, quien estaba atravesando un cáncer de mama y falleció antes de que a él le den la autorización para poder ingresar.

Su hija también tenía cáncer, y los médicos le habían dicho que su salud era muy frágil, por lo que la mujer de 36 pidió ver a su papá antes de morir, cosa que no pudo hacer porque las autoridades de la provincia no lo dejaron entrar debido a que no contaba con un test de de coronavirus negativo.