01 Noviembre de 2017 07:10
Eran cerca de las seis de la tarde de ayer cuando Cecilia Piedrabuena recibió un llamado que le resultó extraño. Era un número privado y dudó en atender. Del otro lado de la línea se encontraba su marido, Ariel Benvenuto, quien había viajado el sábado a Nueva York junto a un grupo de amigos para celebrar el 30 aniversario de su recibida. Acababa de sobrevivir al ataque de Sayfullo Saipov, un inmigrante legal de Uzbekistán de 29 años. Cinco de sus amigos no.
Ariel Benvenuto, uno de los rosarinos que sobrevivió al ataque.
“Estamos bien Iván, Juan Pablo y yo, lo demás es grave”, alvanzó a decirle Ariel, quien había perdido su teléfono y pudo comunicarse con su mujer gracias a que un policía de Manhattan le prestó el propio. Cecilia no entendía nada. “Esto es terrible, muy grave, un atentado”, le explicó a casi nueve mil kilómetros de distancia.
Había pasado una hora desde que Ariel logró esquivar por poco la camioneta que arrolló a cinco de sus amigos. No entendía nada. Había visto cómo las ambulancias trasladaban a las víctimas. No tenía ni siquiera las llaves del departamento en el que se alojaban.
La última foto del grupo antes de viajar el sábado a Nueva York.
“Era el último de la fila, sintió una acelerada y cuando se dio vuelta vio pasar el camión y les arrancó de al lado a sus amigos. Los encontró a todos tirados, desparramados, desgarrados y no supo más que hacer”, detalló Cecilia, quien reconoció en diálogo con LT8 que su marido está “como puede”.
Al momento del ataque, Ariel se encontraba del lado del cantero central, ubicado sobre la derecha. “Me dijo que la camioneta iba a unos 150 kilómetros por hora. Le pasó a sólo 20 centímetros”.
En total murieron ocho personas y otras doce resultaron heridas.
Si bien pudo evitar el impacto, no tuvo tiempo para poder ayudar a sus amigos. “Los vio muy mal en el pavimento porque literalmente los pasó por encima (la camioneta). Aceleró y los pisó”, contó la mujer. Y fue él quien tuvo que avisarles a todos los familiares, pese al shock, lo que había sucedido.
"En total son diez. Ocho que viajaron de Rosario, un amigo de Nueva York y otro de Boston. La vida los separó por sus profesiones y este era un viaje que planearon. Ariel Erlij fue el que pagó los pasajes a quienes no podían hacerlo", aportó Cecilia. Ariel sufrió sólo una fractura. Del grupo se salvaron, además, Iván Brajkovic, Juan Pablo Trevisan y Martín Ludovico Marro, quien se encuentra internado en el Presbiterian Hospital de Manhattan, pero fuera de peligro.
