06 Mayo de 2018 11:35
Los chilenos Felipe Osiadacz y Fernando Candia jamás se imaginaron que unas vacaciones soñadas terminarían siendo una absoluta pesadilla.
Felipe y Fernando podrían ser condenados a muerte.
Luego de trabajar un año en Nueva Zelanda, partieron a descansar y divertirse en Malasia. Sin embargo, en su primera noche allí, se toparon con la tragedia.
De camino al hostel donde se alojaban después de pasar un rato en un bar, un hombre alcoholizado se les acercó y les pidió dinero. Osiadacz y Candia se negaron, pero el mendigo comenzó a ponerse violento y los siguió.
All llegar al hostel, los chilenos le pidieron al recepcionista que llamara a la policía. Fue en ese momento cuando ambos fueron agredidos físicamente por el hostigador y, mientras forcejeaban con él, sufrió un paro cardíaco y falleció.
Una situación desesperante
Osiadacz y Candia fueron detenidos y encarcelados en la prisión de Sungai Buloh. Desde ese momento, sólo les permitieron llamar a sus familias una vez y se comunican por carta.
Candia durante uno de sus viajes.
Y si bien de acuerdo a un informe forense, el hombre que murió se encontraba bajo la influencia de varias drogas, ambos enfrentan acusaciones de homicidio y podrían recibir la pena de muerte en la horca.
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Según explicó Fernando Osiadacz, padre de Felipe, la única esperanza es que la abogada de ambos jóvenes logre que el cargo se cambie por uno de "homicidio negligente". Hasta ahora, todas las cartas de apelación de la letrada han sido rechazadas por los tribunales malayos.
Mientras tanto, Raúl Sanhueza, director general de Asuntos Consulares y de Inmigración de Chile, subrayó que que el consulado asiste permanentemente a los detenidos y a sus familiares desde el primer momento. "Lo tomamos como compatriotas nuestros que están en una situación difícil, y que requieren el acompañamiento y el apoyo de sus cónsules", señaló.