En un fallo inédito, el tribunal de la localidad cordobesa Cura Brochero le quitó la tenencia de un niño de 11 años a sus padres, porque no se podían hacer cargo de él y le proporcionó la guarda preadoptiva a su profesor de computación, con quien el chico tiene una relación casi familiar.
El emotivo caso ocurrio en la localidad cordobesa Villa Cura Brochero.
Sin embargo, aunque ahora parece estar todo resuelto, lo cierto es que desde el comienzo la historia del pequeño resultó muy triste. Cuando apenas tenía 20 días, por situaciones de violencia doméstica y alcoholismo, el bebé fue separado de sus padres y quedó bajo el cuidado de su tía.
Su frágil y pequeña vida quedó en manos de la mujer, con quien sólo vivió hasta sus 8 años. A partir de allí, otra vez en soledad y sin alguien que le diera cobijo, el chico descubrió que podía confiar en alguien que aunque no era parte de su familia, pronto llegaría a serlo.
Es por eso, que en aquel triste entonces, Javier Castellano Echenique, profesor de computación de la escuela a la que asistía el chiquito de 11 años, se hizo cargo de él. En vez de llevarlo a un hogar de niños, el maestro pidió permiso a los padres del nene, y prontamente decidió que debían compartir la misma casa, ubicada en barrio El Paraje.
Castellano pidió la guarda preadoptiva del niño.
A raíz de eso, Castellano le pidió a la justicia "que no se declarara al niño en situación de adoptabilidad y que se considerara su carácter de referente afectivo”, figura que fue incorporada en el nuevo Código Civil y Comercial en su artículo 607, y que se refiere a toda figura de apoyo y sostén emocional de un niño durante su periodo de institucionalización.
Lo cierto, es que de acuerdo a la resolución firmada por el juez José María Estigarribia, se le concedió al profesor la guarda adoptiva del niño, porque se confirmó que ambos habían creado un vínculo mucho antes del fallecimiento de su tía.
Castellano se mostró muy feliz y contó que su relación con el chico de 11 años "ha sido un aprendizaje".
Por su parte, Castellano habló con un programa local, Doce TV, y explicó que su felicidad es inmensa: "Esta experiencia nueva ha sido un aprendizaje hermoso. Intento estar a la altura de la situación que me toca. La verdad es que nosotros dos hemos vivido momentos muy lindos y tenemos la suerte de poder compartirlos con gente muy hermosa y sana".
Además, aclaró cuál es la situación actual del niño: "Él empezó este año la secundaria y la verdad es que está muy contento y yo también. Está muy contento de continuar su carrera de estudiante y con ganas de poder seguir después con la universidad".