Carlos Tévez conmovió al país en una entrevista con Alejandro Fantino. En ella habló de su infancia con privaciones, de su familia, se emocionó al revelar que sus amigos de Fuerte Apache se juntan a comer con él y no le permiten pagar nada. Y también manifestó una observación crítica respecto de Formosa, provincia que visitó con Boca. Allí el xeneize le ganó a Banfield por 16avos. de final de Copa Argentina a fines de julio. En la nota, Carlitos dijo: “En Formosa, el hotel donde paramos es de cinco estrellas, es como si yo ponga un hotel de cinco estrellas en Fuerte Apache, porque la pobreza que hay en Formosa es muy grande. De repente entramos al hotel y era Las Vegas”.
Este comentario disgustó a muchos formoseños. Otros, en cambio, lo consideraron justo. Jorge Santander fue funcionario en la Dirección de Cultura provincial y es actual asesor de la Jefatura de Gabinete de Formosa. En su cuenta de facebook escribió un descargo cargado de odio y resentimiento. Los diarios formoseños dan cuenta de esto. El título de la nota es elocuente: “Lavate la boca para hablar de nosotros hdp”.
El funcionario define a Tevez en su FB como “villerito europeizado” y “enemigo del pueblo”.
El texto no es más conciliador. “Formosa pueblo generoso; pueblo que demuestra su amor y a veces calladamente recibe los golpes que devuelven los amados sin razón ni por qués valederos. Lo recibieron en el Aeropuerto con flores y besos, banderas y multitudes, pasión y calidez y él; villerito europeizado, le devolvió ese afecto a nuestro pueblo rebajándonos a mierda”.
Santander trabajó en la Dirección de Cultura provincial y es asesor de Jefatura de Gabinete formoseña.
En el medio del post intercala las palabras textuales del delantero de Boca, y cierra con otra diatriba furiosa. Acusa a Tévez de “enemigo del pueblo” y estar “ciego por las luces del imperio”. A Tévez, que rechazó 18 millones de dólares de sueldo anuales para ir a jugar a China, que le dijo NO al magnate que le ofreció una mansión en el Lago de Como. El funcionario escribió: “Es increíble que un hijo de la humildad del pueblo argentino haya perdido la mirada y se preste al discurso de los enemigos del pueblo, especialmente cuando ese pueblo humilde lo puso en el pedestal de sus elegidos elevándolo por su origen y por amor. La verdades que las luces del imperio vuelven ciego a los que no están preparados”.
El texto, cargado de odio clasista y discriminación, fue compartido por otros funcionarios provinciales del gobierno de Gildo Insfrán.