Nació en la Argentina y, al parecer, está a salvo de cualquier crisis económica. Su nombre es Víctor Truviano; su profesión, la de gurú. "Víctor Truviano no come ni bebe, pero como él mismo dice, ese es un detalle insignificante, una consecuencia de su estado de conciencia pránica. Un estado de felicidad desde el que deja que el Absoluto se manifieste a través de él", afirma en su sitio Web. En algo estamos en desacuerdo: ese "detalle insignificante" nos llevó a contar su historia en BigBang. ¿Cómo no preguntarle nada al respecto a alguien que dice que no come desde 2006 y que no bebe desde 2007?
Víctor Truviano: dice que no come ni bebe, pero que ese es "un detalle insignificante".
A primera vista, Truviano parece un hombre normal. A ojo, uno diría que pesa unos 75 kilos y que mide más o menos lo mismo. Nada fuera de lo común, excepto que de acuerdo con los cánones de la medicina y con lo que suponemos como el funcionamiento lógico del cuerpo humano, debería estar muerto.
"Hablar de la última vez que comí no me interesa para nada, dice Truviano, pero luego accede.
No le gusta hablar del asunto: le parece un hecho anecdótico y jura que no pretende convencer a nadie de lo que dice. Sin embargo, asegura que si alguien duda de sus dichos, en Internet figuran los exámenes que le realizara el médico Boris Aranovich. Sin embargo, Aranovich no es un médico tradicional sino uno especializado en medicinas alternativas.
"Por supuesto pero si tiene que ver con el no comer, la ultima vez que comiste cuando dejaste de comer y qué fue lo último que comiste no me interesa para nada", dice, cuando BigBang le solicita una entrevista a través de Facebook. Finalmente acepta la inclusión de dos preguntas al respecto.
-La primera entonces (obviando las que me pediste que no hiciera) sería de qué modo reemplazás la necesidad que tenemos los seres humanos habitualmente de alimentarnos. De qué manera la suplís. Disculpá mi ignorancia, pero no sé nada al respecto.
-En primer lugar nada o algo es reemplazable.. Todo tiene una función para su acción y su consecuencia.
-Te sigo...
-Comprendo que existe una necesidad pero muchas veces no es la necesidad del cuerpo sino una necesidad de la mente, que crea una necesidad para el cuerpo. La necesidad que la mente puede llegar o puede llegar a crear para el cuerpo, la mayoría de las veces pueden llegar a ser estados para tapar emociones. Entonces se pueden tapar emociones con la comida o mirando televisión todo el día. O estar todo el tiempo conectado a Internet, o con el sexo. Existen muchas maneras de tapar emociones, que es lo que quería decir.
Truviano con un seguidor, a pura sonrisa.
Truviano reside en la isla de Bali, Indonesia, donde lo visitan habitualmente sus seguidores. Una vez al mes, sin embargo, viaja para ofrecer seminarios o retiros espirituales. Ahora está en Moscú. Desde allí contesta las preguntas de BigBang.
-Lo que en estos años me viene sucediendo y también en los principios de mi vida en este cuerpo físico me ha sucedido muy claro y bastante profunda la sensación real de no tapar emociones y por consecuencia el cuerpo escucha, crea y da consecuencias a sí mismo sin que algo externo lo obligue a continuar una reacción en cadena que viene desde la mente. Obviamente, la mente pertenece al cuerpo y demás, pero en sí la mente no pertenece al cuerpo si lo vemos de otra forma. Lo que sí pertenece al cuerpo es el cerebro, pero la mente es algo que no es orgánico, es como el espíritu del cerebro. Por eso es que digo que la mente en algún punto puede llegar a ser ajena al cuerpo. Pero cuando no tapas emociones, el cuerpo realmente puede escucharse. Entonces vuelvo a repetirte, no es que estoy dejando de lado una cosa por otra, no es que estoy dejando de lado una cosa por otra, sino que tenemos muchas maneras de ingerir.
"Tenemos muchas maneras de ingerir", dice Truviano, que no ingiere por la boca.
"Esto no es un ayuno permanente"
-Te preguntaría si te sometes a controles médicos para verificar su estado de salud (y en tal caso, cuál es su peso y estatura actuales). Y si esta práctica del ayuno permanente está al alcance de cualquiera o sólo de quienes ejercen alguna clase de liderazgo espiritual.
-Yo creo que es muy importante que las personas que son vegetarianas o pránicas, que es lo mismo, se hagan un estudio médico o científico para mostrar desde otro lugar que existen otras posibilidades . Y que eso está en el aire. Por eso te dejo un video de la última estudio que me hicieron y científico (Se refiere al video mostrado más arriba). Esto me lo hicieron cuando estaba viviendo en Suecia y tú sabes, las clínicas de Suecia son extremadamente rigurosas con cualquier tipo de estudio y son muy serias. En esta clínica, atendida por médicos suecos y científicos rusos... aquí puedes ver que los doctores están desorientados con mi fisiología. Algunas máquinas que trajeron de Rusia a Suecia conmigo no funcionaban porque están hechas para personas que comen y beben.
-Y en cuanto al ayuno...
-No se trata de un ayuno permanente. Un ayuno es cuando tú comienzas algo y sabes que va a terminar. Eso es un ayuno. Pero cuando lo comienzas y es perpetuo, ya deja de ser un ayuno ... no hay un límite para llegar a su fin. El estado pránico en mí no viene de esta vida sino de otros tiempos. La vida misma me fue preparando para esto, no lo he buscado. No creo que tenga un liderazgo espiritual, porque creo que lo estás diciendo en relación con las personas que quizá podrían llegar a seguirme o vvenir a nuestros encuentros. Todo liderazgo espiritual es sola y únicamente con mi ser. Mi única obligación es conmigo y todo lo que se genera dentro de mí también tiene muchas consecuencias en lo externo. Y esas consecuencias no son creadas ni buscadas.
"Cuando lo comienzas y es perpetuo, deja de ser un ayuno.
Habla con un tono de susurro, casi de arrullo. Tiene una apariencia andrógina y todo es amable suavidad en él. Recorre el mundo dando charlas y ofreciendo retiros espirituales que se cobran en dólares. Según el diario uruguayo El País, el que ofreció el año pasado en Montevideo costaba U$S900. Lo que enseña se llama "conciencia pránica". La comunidad científica se asusta un poco cuando lo escucha. No es necesario consultar a una docena de médicos para que nos digan que lo suyo es imposible. Sin embargo, Truviano es un gurú en ascenso en el mundo de la espiritualidad oriental. Quedan mil preguntas y repreguntas por hacerle, pero informa que debe partir y así lo hace. Si dice la verdad, no lo esperan para cenar.