30 Marzo de 2020 12:39
De acuerdo a un informe de la Secretaría de Ambiente de la Ciudad de Buenos Aires, la calidad del aire mejoró luego de que se dictara el aislamiento obligatorio por el brote del coronavirus.
Así, las partículas contaminantes se habrían reducido en un 50% según un relevamiento de la Agencia de Protección Ambiental (APrA) realizado entre el 20 y 25 de marzo. La Secretaría atribuye estos resultados a la disminución del tráfico vehicular, que en las autopistas porteñas cayó un 72%.
En Europa, a través de datos registrados por los satélites Sentinel de la agencia Copernicus, se confirmó una gran reducción en las concentraciones de dióxido de nitrógeno en Madrid, Barcelona, Milán y París.
"Nunca habíamos visto algo así en Europa", señaló Claus Zehner, jefe de la misión Sentinel. Aunque las imágenes no permiten saber el valor exacto del descenso de la concentración de dióxido de nitrogeno, el científico calculó que se ubica entre el 30% y el 40% de los valores medios.
Animales exóticos en México
Mientras tanto, en México, ejemplares de animales en peligro de extinción como el jaguar, la tortuga laúd, el hocofaisán y algunos cocodrilos fueron avistados en zonas urbanas de Cancún y el Caribe mexicano, hoy vacías de turistas.
"Estas especies van perdiendo su hábitat en la medida que se urbanizan las ciudades y los espacios donde habitan se van quedando más pequeños", señaló al respecto el secretario de ecología y medio ambiente del estado de Quintana Roo, Alfredo Arellano. "Son casos muy notables porque ante la ausencia de la gente, con los hoteles cerrados, las playas vacías, las calles sin coches, la fauna regresa naturalmente a esas zonas".
Mar transparente
Paralelamente, en la ciudad colombiana de Cartagena se observa un fenómeno similar al registrado en Venecia, donde la ausencia de tráfico de botes en los canales asentó los sedimentos devolviéndole claridad al agua.
Así, el mar de la bahía de Cartagena recuperó su transparencia luego que se suspendiera toda actividad marítima desde el 11 de marzo. Además de remover sedimentos, muchas veces las embarcaciones aportan derrames oleosos y contaminantes que contribuyen a la contaminación.