11 Agosto de 2016 09:33
“Es algo que se ve no sólo en Bahía, sino a nivel nacional. Los jóvenes están solos y en las familias no hay diálogo. Además, le buscan sentido a cosas virtuales, como los `pokemones'. Esto también es una adicción”. Lo dijo Javier Di Benedetto, 32 años, diácono de la Pastoral Diocesana de Adicciones y Drogadependencia. O sea que los pokemones son un viaje de ida.
Pokemones: ¿son la droga misma, son un camino hacia ella?
Di Benedetto participó ayer desde las 8:30 de la reunión de la subcomisión de prevención de adicciones de la Mesa de Observatorio de Narcotráfico en el recinto del Concejo Deliberante de Bahía Blanca. “Los padres son quienes le dejan la herencia a sus hijos. La visión del mundo, los límites, el amor, el idioma... y en este sentido somos, en gran medida, responsables”, aseguró, según publicó el diario bahiense La nueva provincia.
El Observatorio de Narcotráfico es una especie de simposio del cual participan los partidos políticos, movimientos sociales ONGs y movimientos religiosos. Di Benedetto presentó el libro La puerta abierta de la misericordia, una propuesta eclesial al problema de la droga, donde no hay alusiones al Pokémon Go, que todavía no había sido inventado.
