15 Diciembre de 2015 08:31
La localidad de Alderetes, ubicada a 12 kilómetros del centro de la provincia de Tucumán, está revolucionada. Pasaron veinte días desde la última vez que Daiana Garnica fue vista por su familia. Estaba tomando mate con su mamá cuando su vecino, Darío Suárez, le envió un mensaje de texto. En pocas líneas le propuso acompañarlo a comprar un aire acondicionado para su mamá. Daiana aceptó.
La joven fue engañada por su vecino.
En los mensajes siguientes, Suárez le pidió que no dijera que iba ir al centro con él, sin sospechar que se el destino sería otro. Así es cómo repasa la familia de la joven, las últimas horas que compartieron con ella. Esos mensajes, juntos a otras conversaciones son los indicios que analizan los investigadores. Para ellos existía una relación sentimental entre la joven y Suárez.
A su vez, luego de distintos operativos realizados con perros rastreadores se encontraron dos cartas en donde el detenido le proponía a la adolescente de 17 años mantener relaciones sexuales con una de sus amantes. Pero no solo al aire libre y filmarlo con su celular. Daiana no aceptó. En otra de las cartas, Suárezle declara estar enamorado de ella. Ambos mensajes son investigados para determinar la fecha y el contexto en las que se las habría dado.
LAS CARTAS: SEXO Y AMOR
En las cartas se ve que, con una caligrafía muy parecida a la de Suárez, un hombre le declara su amor a Daiana. Aunque el contenido completo de las notas no trascendió, se conoció que en ellas admitía estar enamorado de ella y extrañarla cuando no estaban juntos.
Suárez mantenía relaciones paralelas
Suárez y Garnica conversaban en secreto. Él es casado, y cuenta con experiencia en mantener relaciones paralelas. Según detallaron los investigadores, el hombre se tuvo dos hijos con una mujer, a la que luego abandonó. Al tiempo tuvo un romance con la hermana de su ex pareja, es decir su ex cuñada. En esta nueva relación, Suárez tuvo otro hijo. Y como si fuera poco, también veía con frecuencia a una vecina del mismo barrio, con quién tuvo otro hijo. No hay dudas de que Daiana sería una más de las mujeres que intentaba conquistar.
LA BÚSQUEDA
Para intentar tener más indicios para determinar dónde está Daiana se sumó esta semana al operativo de búsqueda el mismo grupo de perros que participaron en el caso de Araceli Fulles, la joven de San Martín desaparecida el 1 de abril y hallada 27 días después enterrada debajo de un falso sobre piso.
Los perros encontraron las cartas.
Los canes recorrieron los márgenes del río Salí. Allí encontraron las cartas, dentro de unas bolsas de residuos. Según declararon vecinos de la zona, fueron vistos dos hombres tirando basura. Los investigadores sospechan que César López, hermano del principal sospechoso, lo ayudó a deshacerse de distintos elementos que podría haber utilizado para hacer desaparecer a la menor. Por este motivo, César, junto a otros familiares y cercanos, quedaron detenidos por encubrimiento. (ver debajo)
También habrían hallado una bolsa con un pedazo de piola de un metro aproximadamente que podría haber sido utilizada en el supuesto homicidio de la adolescente. A su vez, en otro allanamiento se encontró una nota guardada dentro de un paquete de cigarrillos y podría haber sido escriba por la menor.
Como si fuera poco, no pasó desapercibido que el horno de la ladrillera donde trabajaba Suárez haya sido utilizado el día en que la joven desapareció. Desde hace seis meses, ese mismo horno estuvo fuera de funcionamiento. Los pesquistas creen que el hombre la mató y después quemó su cuerpo para borrar las pruebas.
LOS ENCUBRIDORES
Los investigadores creen que Suárez contó con la ayuda de varias personas. Por pedido del fiscal Carlos Bonari, fueron detenidos Fabián "Sapo" Pacheco, compañero de trabajo de Suárez, y Juan Mátar, el dueño de la ladrillera donde, se presume, habrían quemado los restos de la menor.
También fueron detenidos César y Miriam Suárez, hermanos del principal acusado, acusados por presunto encubrimiento; y Yanina Alejandra Villareal, la esposa de Darío Suárez, quien según el fiscal podría haber tenido actitudes para ocultar el crimen. Igual acusación pesa sobre Elena Villareal, cuñada del acusado, y su suegra, Juana Rosa Funes, quienes viven frente a la casa de la familia Garnica.
Además, Mavi Castro, prima de Suárez, y Carmen Santana, presunta amante del principal sospechoso, se sumaron a la lista de las detenciones por "presunto encubrimiento" del crimen. Por último, quedó detenida una mujer que se presentó de manera espontánea como testigo. Ésta seria la ex esposa del hermano de Dario Suárez y estaría sospechada de encubrimiento.