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Una historia de proxenetas, traiciones y abortos clandestinos

Aldo Papini, de 81 años, fue acusado de practicar abortos ilegales en sus dos clínicas de Castelar y San Justo. En exclusiva, detalles de la investigación que lo involucra. Además, quién es el empleado suyo que está sospechado de vender droga y manejar una red de trata. La clave de la mujer despechada.

por Rodolfo Palacios

08 Junio de 2015 11:16
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A los 81 años, Aldo Papini - el suegro de Ricky Sarkany, el zapatero más famoso de la Argentina- quedó involucrado en una historia policial que se parece al argumento de una película de Tarantino: hay proxenetas, mujeres obligadas a prostituirse, traiciones, venta de droga y una venganza impensada. La Justicia acusa a Papini de dirigir dos clínicas donde se practicaban abortos clandestinos.

“Se tiró de una punta y llegamos a ese hombre”, dice una fuente judicial que investiga el caso. El suegro del empresario del calzado fue imputado junto a otras cinco personas porque presuntamente practicaba abortos clandestinos en dos clínicas de Castelar y San Justo.

¿Cómo se llegó a Papini? La Justicia investigaba a una red de proxenetas que manejaba prostíbulos en Morón. Uno de los involucrados es Juan Carlos Basualdo, hombre de confianza y chofer del fiscal general de Morón, Federico Nieva Woodgate. El hombre fue acusado de vender droga y de manejar prostíbulos. “Papini no tiene nada que ver con la prostitución y la droga, sólo se lo imputó por los abortos clandestinos. Cuando seguimos a Basualdo descubrimos que era empleado de Papini. Investigamos si las chicas víctimas de trata eran llevadas a esa clínica”, dijo un investigador.

“En esa pesquisa comprobamos que Basualdo trabajaba en la clínica de Papini haciendo tareas administrativas”, confirmó a BigBang una fuente de la investigación.

Graciela Papini, esposa de Sarkany, junto a su padre Aldo y su madre. Fuente: Diario Perfil.?

La caída

El miércoles, efectivos de la Policía Federal llegaron a la casa del médico Aldo Mario Papini, ubicada en un country de Boulogne, en San Fernando al 1500, Lote 113. Uno de los allanamientos se realizó en Bartolomé Mitre al 2400, en Castelar, donde funcionaba una clínica no registrada legalmente. Allí se secuestraron insumos, medicamentos e instrumental que podrían ser utilizados en prácticas abortivas. 

La investigación está a cargo de la fiscal de Morón Claudia Victoria Fernandez. “En Morón, la connivencia policial con prostíbulos y casas de tolerancia donde se practican abortos es una vieja práctica”, dijo la abogada Analía Fangano, que desde hace seis años viene denunciando este tema. Por entonces, una chica de 15 años murió después de que le practicaran un aborto en una de esas casas.

“La connivencia policial con los prostíbulos y las casas de tolerancia son una vieja práctica

BigBang intentó comunicarse con Ricky Sarkany pero no respondió los llamados. Había viajado a Berlín para ver la final entre Barcelona y Juventus. “Está muy mal, cree con firmeza en la inocencia de su suegro”, dijo un allegado.

“Basualdo trabajaba en la clínica de Papini. Era un histórico e insospechado chofer del fiscal general que hasta es sospechado de alterar el resultado de algunas causas. También fue acusado de hacer trabajar a su esposa en prácticas ilegales. Es por eso que ella se cansó de los maltratos y decidió denunciarlo. Por ese despecho se llegó a descubrir esta red delictiva”, dijo una fuente judicial a BigBang

Juan Carlos Basualdo, copa en mano, junto a su hijo Eduardo y su familia. Foto: Tiempo Argentino.

 Cuando fue detenido, Papini estaba con su hija Graciela. “Lo de las casas de tolerancia fue durante muchos años un secreto a voces. Cuando tenían algún problema con una chica, la trasladaban en ambulancia a Capital Federal. Habría que preguntarse si todo esto fue porque alguien se negó a pagar alguna coima”, dijo una fuente de la investigación. Si la causa prospera y surgen pruebas para mantener la imputación de Papini, por su edad podría cumplir arresto domiciliario.

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