La polémica decisión del juez en lo Contencioso Administrativo, Pablo Cayssials, quien declaró inconstitucional parte de la reforma de la ley de Educación Superior aprobada el año pasado, que prohibía los exámenes de ingreso en las universidades públicas, no hizo más que potenciar aún más la conflictiva situación que se vive hoy por hoy en las facultades.
El juez Cayssials argumentó que “la enseñanza superior no debe ser generalizada”.
El magistrado, que consideró que esa modificación “viola la autonomía universitaria”, hizo lugar a un recurso de amparo de la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM) contra el Estado nacional y falló la inconstitucionalidad de los artículos de la ley 27.204, que establecía el acceso libre e irrestricto.
El magistrado hizo lugar a un recurso de la Universidad Nacional de La Matanza.
La decisión de Cayssials había sido tomada en marzo, pero recién este martes se dio a conocer en un contexto de alta conflictividad, debido al retraso en los salarios docentes y la situación de ahogo presupuestario en casi todas las casas de estudios públicas.
Una postal de la situación, facultades tomadas y clases públicas.
Según la Federación Nacional de Docentes Universitarios (CONADU), que consideró “gravísimo” el fallo, el juez habría argumentado que “la enseñanza superior no debe ser generalizada, sino sólo disponible sobre la base de la capacidad”.
El próximo jueves, los gremios docentes, federaciones universitarias de todo el país, estudiantes y distintas organizaciones políticas de la izquierda y el kirchnerismo realizarán una “Marcha Nacional por la educación pública” desde Plaza Houssay hasta el Ministerio de Educación.
Una asamblea de estudiantes. Las medidas se intensificaron en las últimas horas.
Las medidas de fuerza, que incluyen paros y clases públicas, comenzaron hace algunas semanas, pero se intensificaron en las últimas horas a partir de la negativa de CONADU y CONADU Histórica a aceptar la propuesta de un aumento de un 15 por ciento para los docentes para el mes de mayo, como primera etapa de una paritaria del 30 por ciento.
Ambas organizaciones convocaron a un paro de 48 horas para el jueves y el viernes, que coincidirá con la movilización en reclamo de la recomposición salarial y el envío urgente de presupuesto que garantice el funcionamiento de las casas de estudio.