El asesinato de Daniela Iara Soledad Rodríguez, la adolescente de 15 años que murió de un disparo a manos de su novio, Fabricio David Chiribe, un año mayor que ella, volvió a poner en primer plano el tema de los femicidios, lamentablemente tan en boga en este último tiempo en nuestro país.
El caso de Daniela volvió a poner el tema femicidios sobre el tapete.
Por eso, BigBang se comunicó con el psiquiatra forense y médico legista Enrique De Rosa, para tratar de entender qué puede pasar por la mente de una persona, y más en el caso de un joven de apenas 16 años, para cometer un acto de este tipo.
El profesional explicó que "hay muchos casos de violencia entre adolescentes" y que "lo que se vive desde hace unos años es que el nivel de violencia se ha incrementado en una franja que uno suponía que no pasaba"
El psiquiatra forense y médico legista, Enrique De Rosa.
"Hay muchos casos de novios muy jóvenes con novias golpeadas y golpeadas fuertemente", agregó De Rosa, para luego adentrarse de lleno en una posible explicación a este tipo de casos.
"Si uno a eso le asociara la disminución de frenos inhibitorios ligado a cuestiones hasta sociales, tóxicas, de alcohol y demás, en realidad la combinación explosiva existe. Yo si tengo una estructura de personalidad débil, y vivo todo como persecutorio, pero aparte no tengo forma de contenerlo porque vivo alcoholizado o drogado, es casi inevitable el pasaje al acto, y el pasaje al acto es justamente una esfera absolutamente no racional, no es planificado", analizó.
"En general son pasajes al acto celotípicos", sentenció y explicó que "no son actos premeditados porque en realidad hay una escalada de la violencia".
"En la violencia física pasa exactamente eso, el uso de la palabra ´correctivo´, que es tremendo, o el ´ella también pegaba´como para tratar de justificar. Cuál es el peligro, que en general los hombres tenemos más posibilidades físicas, y tendencia a "perder la cadena", y ese "perder la cadena" es perder los frenos inhibitorios", comentó.
De Rosa explicó que son "pasajes al acto celotípicos" y que "no son premeditados".
Consultado sobre si podía tratarse de un psicópata, el reconocido psiquiatra descartó esa idea y afirmó que era algo que le podía llegar a pasar a cualquier persona.
"A nosotros nos servía mucho y en los últimos años se abusó del término psicópata porque en realidad nos conviene pensar que los delitos los hace gente que no es como nosotros y la famosa idea de la normalidad o anormalidad. En realidad no es una enfermedad, es una alteración del carácter pero que ya forma parte de la sociedad, somos sociedades sociopáticas, traumatizadas, en las cuales prima más nuestro ego que el otro", analizó.
El reconocido médico descartó que el asesinato de Daniela sea obra de un psicópata.
"Es cómodo ponerle un nombre, la idea tradicional del loco, es a criterio de la normalidad, cuando ves que la norma se te empieza a correr, ya no podés hablar de normalidad y anormalidad. La sociedad ha virado a una sociedad mucho más violenta donde el valor vida es mucho más relativo por encima de mi ego", completó.
"Somos una sociedad que no le presta atención al nivel de violencia en el que vivimos, entonces en ese nivel de violencia la posibilidad de pasar al acto es muy cortita, ése sería el tema. La línea se ha ido corriendo, somos una sociedad que le presta poca atención a los niveles de violencia", agregó.
"Es muy factible que mañana nos enteremos que había amenazado con un arma a un amigo", afirmó De Rosa.
"Es muy factible que mañana nos enteremos que este chico ya había amenazado a un amigo con un arma, esa es la parte preocupante, no parece un loco aislado que un día se detonó", concluyó al respecto.