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Manuel Pereira tramita, ayudado por su familia, su pensión por invalidez desde hace cuatro años. Sufre de retraso mental. Este mediodía llegó a la sede central de la ex Comisión Nacional de Pensiones, actual Agencia Nacional de discapacidad). Pereira fue recibido por Juan Cruz Escardó, actual Director Nacional de Apoyo y Asignaciones Económicas. La respuesta que recibió no fue satisfactoria. Entonces, desesperado, Pereira rompió un vidrio y decidió cortarse las venas. Se salvó de milagro. Sucedió esta mañana frente a la sede de la agencia, en Hipólito Yrigoyen 1447.
Entre insultos, mientras mana abundante sangre de su brazo, Pereira insulta a los gobernantes y al funcionario que lo atendió y pide a gritos una ayuda que no llega.
"Fue asistido y contenido por nosotros hasta que llegó la ambulancia del SAME,", revela un trabajador estatal que prefiere no ser identificado. En los últimos meses fueron despedidos 61 trabajadores de la Agencia Nacional de Discapacidad. Según la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), alrededor de 100 mil pensiones por discapacidad están frenadas desde que la Comisión Nacional de Pensiones se convirtió en la Agencia Nacional de Discapacidad.