El momento previo a irse de vacaciones suele estar cargado de ansiedades, ya que la persona debe ordenar y organizar todo de cara al viaje que va a realizar. Incluso, se hace complejo terminar con las tareas laborales y dejar todo concluido, porque sin querer, se empieza a estar más distraído y con ganas de estar en el destino que uno va a visitar.
Sin embargo, lo mayormente complejo no es el último día de trabajo, sino el primero, cuando se regresa del receso. Sucede que en las vacaciones la relajación está presente, y suelen modificarse los horarios, las comidas, los tiempos que se dedican a cada cosa e incluso el descanso, el cual muchas veces escasea durante la rutina laboral.
Por eso mismo, el retorno a la oficina, el negocio o a la tarea que se haga, ya sea de forma presencial o virtual, requiere un cambio de chip. En algunos casos puede ser más difícil y puede necesitar de un tiempo de adaptación a la rutina que ya se conocía, pero que por unos días fue olvidada y cuesta mucho retomar.
Consejos para encarar el regreso al trabajo
Organizar todo antes de las vacaciones: para evitar exceso de tareas pendientes al regreso del receso es de gran ayuda dejar el trabajo lo más organizado posible, de esta manera se evita sentirse abrumado al regreso. Delegar también es una parte importante para que la vuelta sea más organizada y en el caso de tener reuniones virtuales o presenciales es recomendable que sean en la segunda semana de reincorporación.
Tener una readaptación: antes de volver a la rutina laboral es recomendable tener unos días de adaptación, por ejemplo empezando con despertarse a un horario parecido al del trabajo, almorzar en el horario similar al laboral o, en el caso de volver de vacaciones, tener un tiempo para ordenar la valija y ropa del viaje.
Una vez en el trabajo, hay que organizar las tareas y darles un orden de importancia, empezar con los asuntos que requieran resolución inmediata y luego continuar con los demás. Los recordatorios servirán de gran ayuda para llevar adelante este paso, así como también la buena predisposición. Reducir las tareas también es una buena manera de ponerse al día con los pendientes y hacer una limpieza general.
Disfrutar del trabajo y luego de él: los momentos de ocio son necesarios en la vida de todas las personas, incluso son de gran ayuda a la hora de la creatividad. Es por esto que Adecco Argentina recomienda incluir pequeños hábitos que son más comunes en los días de vacaciones a los días de rutina laboral, por ejemplo desayunar leyendo una revista interesante, realizar actividad física antes o después del trabajo, realizar ejercicios de estiramiento después de alguna reunión, dar algún paseo para distraerse luego del trabajo, entre otros.
Aprovechar los fines de semana: hacer una pausa cada tanto de la rutina laboral u hogareña es beneficioso para la salud; realizar escapadas de fin de semana a destinos no conocidos o realizar actividades al aire libre que fueron postergadas ayuda a eludir el desgaste laboral.