23 Abril de 2016 09:57

Bajo una llovizna y con una multitud de familiares emocionados, zarpó hoy desde el puerto de Buenos Aires la Fragata Libertad, el buque escuela que empieza su 45° viaje de instrucción para los cadetes de las dos últimas promociones de la Escuela Naval Militar y de países vecinos como Brasil, Chile, Bolivia, Paraguay y Uruguay.
La bruma y la fragata.
La fragata partió a las 8.17, sin los marineros que ejecutan las maniobras de las velas en lo alto de los palos, debido a las condiciones climáticas.
Movimientos previos a la partida.
Entre familiares y allegados hubo llanto, tristeza y alegría. Saludaban con pañuelos blancos y los brazos extendidos, mientras sonaban los acordes de la banda de Música de la Armada.
Emoción en la partida.
En el buque viajan 27 oficiales, 192 suboficiales y 132 oficiales alumnos argentinos y de países vecinos, entre los que el 20 por ciento son mujeres.
Los saludos de los protagonistas.
La emblemática embarcación volverá el 5 de noviembre, tras un itinerario que durará 196 días, de los cuales 133 permanecerán en el mar.
Música en la despedida.
"Se va mi sobrino que tiene 24 años, lo vi muy maduro", le dijo a la agencia Télam José -tío de Matías- con "una alegría muy grande porque es el viaje que él estaba esperando con mucha ansiedad, porque va a conocer distintas partes del mundo y este viaje es como una parte nuestra que nos está representando en el exterior".
Emociones encontradas para las familias.
Gladys, mamá de Luis, explicó que "la partida es triste, pero él esta contento, está ilusionado por todo lo que va a conocer, por todo lo que van a vivir y poner en práctica lo que estudió en cuatro años".
Otra postal de la salida.
Los papás de Bruno, otro de los cadetes egresados, llegaron a Buenos Aires desde Goya (Corrientes) para despedir a su hijo de 38 años, que es teniente de navío. "Es una emoción verlo partir y después verlo volver, él ya viajó pero esta vez va mucha más gente porque se van dos promociones juntas", dijo Susana, la mamá.
Dos promociones abordo.
Entre la multitud lloraba Macarena, de 23 años, la novia de Husi, otro de los cadetes que partió: "Estoy muy triste porque se va; ahora, a ser fuerte y esperarlo". De todos modos aclaró que estaba contenta porque a él le gusta, "que lo disfrute, es su felicidad".