El viernes pasado, Marcelo Tinelli dio comienzo a un nuevo ritmo que terminó decepcionando a todo el jurado del Bailando por un sueño, sobre todo a la producción de Showmatch. Para muchos, el reggaetón romántico fue una gran desilusión, un témpano, por su bajo nivel de sensualidad, por lo que el conductor ya avisó que pretende que haya cambios para esta noche.
La pareja que abrió la pista es una de las mejores del ciclo: La Chipi y Mauro Caiazza, con una coreografía de “Duele el corazón”, de Enrique Iglesias y Wisin. Los participantes fueron elogiados por un jurado que esta vez se puso exigente y lograron un total de 25 puntos. El resto, en cambio, vivió un papelón en primera persona, ya que los tres siguientes no superaron los 13 puntos.
Sol Pérez, quien utiliza su ejercitada figura para subir la temperatura de las redes, decepcionó. Marcelo Polino le puso un cero y quedó casi sentenciada con 12 puntos. Rápidamente, las miradas se pusieron en Jey Mammon, que pese a su humor tampoco estuvo a la altura de las expectativas. Ángel de Brito y, una vez más, Polino le pusieron un cero para cerrar la gala con 8 puntos.
Por último, el gran escándalo de la noche. Melina Lezcano apareció en la pista luciendo un camisón que le tapaba todo el cuerpo y que recién se quitó finalizando la coreografía. La más despiadada del jurado, para la sorpresa de todos, fue Pampita quien la tildó de “irrespetuosa” por presentarse en esas condiciones a bailar sabiendo de qué iba el ritmo.
“No te puedo perdonar que hayas Bailado todo el reggaetón con un camisón... Es una falta de respeto”, dijo la modelo provocando el llanto de la cantante. Este lunes, Lezcano explicó que siempre fue insegura de su cuerpo producto de las burlas que recibió durante la época escolar. “Yo tengo ciertos mambos con mi cuerpo; de chica sufrí mucho el tema de la flacura”, dijo.
Lezcano y el camisón de la polémica.
Y agregó: “Toda la vida me tapé...No era bullying, pero en la escuela me decían desnutrida, patas de tero. Yo usaba la pollera larguísima. No me sentía cómoda. Me daba cosa estar entangada para ese momento”. En esa línea, la cantante de Agapornis explicó que, pese a que no se vio, durante el ritmo se llevó la mano a la entrepierna como parte de la propuesta y su compromiso.
Ante el pésimo debut del reggaetón, la producción decidió reunirse con los encargados de vestuario: Este año, María Vilariño es quien está a cargo del vestuario del certamen, remplazando a la histórica Lana Ferrando. Además, el equipo dirigido por Pablo “El Chato” Prada y Federico Hoppe también arregló con los jefes de coach para que se modifiquen todas las coreografías.
Sol Pérez, una de las posibles sentenciadas de este ritmo.
La razón es que Tinelli quedó disgustado por lo hecho durante el debut del ritmo. Así, por lo menos, lo aclaró en las redes sociales. “Que el ritmo se llame Reggaetón romántico es sólo para tener más temas musicales. No cambia en nada la esencia caliente del Reggaetón”. De esta manera, el conductor dejó algo en claro: o le meten calentura o irán a la sentencia.