12 Diciembre de 2017 15:00
Con la eliminación de Gladys La Bomba Tucumana y Melina Lezcano, este martes se sabrá cuáles serán las parejas que pelearán por un lugar en la final del 18 de diciembre. Este lunes, el Bailando 2017 tendrá un nuevo campeón y por esta misma razón, ese día Las Estrellas no saldrán al aire y, en su lugar, después de Telenoche, estará un programa dedicado a la previa del certamen.
La final del Bailando sería, si todo sale bien, el lunes.
De esta manera, en lugar de disfrutar de las locuras de Celeste Cid, Luciano Castro o Marcela Kloosterboer por la pantalla de El Trece, Paula Chaves y José María Listorti traerán lo mejor del Bailando por un sueño de este año: los mejores looks, el puntaje más alto o bajo de todo el año, las declaraciones de los protagonistas o los escándalos más atrapantes.
Pero mientras todos ya palpitan una nueva instancia final del programa más visto del país, un nuevo problema le surgió a Marcelo Tinelli. Los trabajadores de Ideas del Sur, los cuales se llamaron a Asamblea Permanente hasta regularizar su situación salarial, lanzaron un nuevo ultimátum de cara a este lunes que pone en dudas, otra vez, la salida al aire del ciclo.
Tinelli debió abandonar Ideas del Sur en diciembre pasado.
Este martes se dio a conocer que la Comisión Interna anunció que si la empresa a cargo del Grupo Indalo O CEIBO -su venta al grupo inversor OP Investments todavía no fue validada por la Justicia- no deposita el próximo 18 de diciembre, antes del mediodía, los aguinaldos de todos los trabajadores se suspendería la final del Bailando 2017.
Estas no son buenas noticias para Marcelo Tinelli, quien viene siendo castigado desde hace varios meses por la crisis de Indalo y las innumerables quejas de los empleados, actores, proveedores y hasta del propio jurado del Bailando por un sueño. Sin ir más lejos, los jefes de coach, Hugo Ávila y Lolo Rossi, se dieron por “despedidos” y ya no serán parte del show.
Hugo Ávila y Lolo Rossi se dieron por "despedidos".
Cabe recordar que los jefes de coach le enviaron una carta documento a Indalo exigiendo el pago de haberes. Ese mismo camino también lo tomaron Cinthia Vargas -responsable de coach- y María Calatayud, jefa de prensa del ciclo. A su vez, esto provocó el enojo de la empresa, la cual como primera medida les impidió el ingreso a los estudios de ShowMatch.
Esta suerte de sanción, sin embargo, pudo recomponerse tras la intervención de los productores del programa, Federico Hoppe y Chato Prada, a pedido de Marcelo Tinelli. Pese a esto, al ver que la situación salarial de muchos trabajadores comenzó a regularizarse -no así las suyas- Ávila y Rossi decidieron plantar bandera y darse por despedidos.
Paula Chaves y José María Listorti conducirán la previa de la final el lunes.
Según pudo averiguar BigBang, la situación de los jefes de coach podría llegar a regularizarse antes de la final y su futuro dentro del show podría cambiar. Otro de los dolores de cabeza que le surgieron a Tinelli en las últimas horas tiene que ver con las próximas temporadas de ShowMatch: el conductor se aseguró seguir por la pantalla de El Trece en 2018 y 2019.
Tinelli busca la ayuda de El Trece.
El vicepresidente de San Lorenzo tuvo algunas reuniones con Adrián Suar y Pablo Codevilla, gerente y director de programación, respectivamente, de El Trece y el canal le manifestó el deseo de seguir contando con el producto Showmatch. ¿Pero se podrá seguir llamando de esta forma?
Este portal pudo saber que el nombre “ShowMatch” pertenece a la productora Ideas del Sur, la cual dejó de ser en su totalidad de Marcelo Tinelli y hoy forma parte del conglomerado de medios que fundó Cristóbal López junto a su socio, Fabián de Souza.
De esta manera, el conductor se vería obligado a cambiarle el nombre -otra vez- a su exitoso ciclo televisivo por no disponer de los derechos. Al mismo tiempo, para su tranquilidad, el Bailando por un sueño podrá seguir sin modificaciones, ya que el formato del certamen sí le pertenece a Tinelli.
¿Peligra la final del Bailando?
El conductor rescindió su contrato con el Grupo Indalo, empresa dueña de Ideas del Sur, y acusó a sus dueños ante la justicia de "estafa", "desbaratamiento de derechos acordados" e "insolvencia fraudulenta". La deuda con el conductor supera los 40 millones de dólares, hay 27 cheques rebotados y en un año sólo se le pagó un solo sueldo.