Amores tóxicos
El amor tóxico es aquel que daña, que lastima y que deja marcas. Y relacionándolo con la actualidad y todo lo que acontece día a día entre los argentinos , a veces me pregunto si no tenemos un especie de amor tóxico con la clase política , pienso en esos dirigentes políticos que han llevado adelante funciones públicas y nos han traicionado dañándonos en lo más profundo de nuestro ser ciudadano, que nos han dejado con la sensación de que nunca sabremos la verdad de algunas cuestiones , de que nunca terminaremos con nuestras crisis económicas y de que siempre la corrupción será moneda corriente en el hacer social político.
Cuánto tiempo más soportaremos tantos atropellos, tantas humillaciones y tantas mentiras. Cuando será el día que lo ciudadanos estaremos primero en el orden de prioridades, cuando nuestros problemas serán atendidos. Escuelas públicas en estado de decadencia, aumento de la pobreza, personas en situación de calle etc.
Nuestros próceres como San Martín, Belgrano entre otros soñaron un país, pelearon por sus ideales y construyeron los cimientos para una nación, creyeron en este suelo, lo amaron porque lo visualizaron como su hogar, por eso lo cuidaron, trabajaron para que crezca y se convierta en una patria prospera. Entonces es inevitable preguntarse por qué están difícil encontrar dirigentes en lo que se pueda volver a creer...es una pregunta compleja de responder y sólo con el tiempo lo sabremos pero mientras tanto lo que si podemos hacer es volver a creer en cada uno de nosotros , amarnos , respetarnos y de esa forma no permitir que nadie nos lastime y se aprovechen de nuestras vulnerabilidades para eso tenemos que esforzarnos , cuidar nuestros recursos, no bajar los brazos y exigir que no se violenten nuestros derechos.
En síntesis no quedarnos callados , reclamar lo que sea justo, trabajar tenazmente, acompañar a nuestros gobernantes y señalar los errores si es que se comenten, no dejarnos pisotear, en pocas palabras: ¡¡POR FAVOR NUNCA MÁS AMORES TOXICOS!!