La dirigencia política actual corre a la velocidad de los medios de comunicación y las redes sociales. Vemos en continuados políticos preocupados por su imagen pública, en la realización de anuncios estridentes de obras y medidas que luego no son concretadas.
Todas estas acciones forman parte de la idea de seducir al votante en las elecciones en el que es convocado el pueblo. Estos rasgos de esta nueva clase dirigente fueron descriptos por un filósofo y escritor francés llamado Regis Debray, en un pequeño libro llamado “El Estado seductor”.
Debray define esta nueva Era de comunicación política como “videoesfera”, en la que prevalece la construcción de la imagen y se busca persuadir a los ciudadanos, que no son visto como tales, sino como clientes y consumidores a los cuales hay que seducir.
Llevando los conceptos que aporta Debray a la actualidad política argentina, los candidatos que llegaron al balotaje en las últimas elecciones presidenciales, de una u otra manera, dieron cátedra de lo que es llevar a cabo una comunicación política que buscaba seducir a los ciudadanos con argumentos vacios, falaces y sin coherencia ideológica.
El candidato del Frente Para la Victoria Daniel Scioli, en aquel entonces gobernador de la Provincia de Buenos Aires, en su spot de campaña instaba a conseguir “Tu Victoria”. Parte de las victorias eran las supuestas victorias en educación, seguridad y salud en el distrito bonaerense que gobernó durante ocho años. En estos aspectos principales de cualquier Estado del mundo, los colegios, hospitales y la seguridad han visto un alto detrimento por falta de gestión.
Desde 2007 a 2015, años en que el hombre de la ola naranja fue gobierno, nunca las clases han comenzado en tiempo y forma. Los colegios padecen falencias de toda índole, desde infraestructuras con peligro de derrumbe, pasando por docentes mal pagos y hasta falta de educadores en las aulas por no recibir las condiciones básicas para poder brindar clases. La realidad de los hospitales públicos no es muy distinta, con falta de insumos y médicos que padecen la inseguridad del conurbano, el gobernador ha realizado inauguraciones a mansalva de los hospitales “UPA” en plena campaña, Con la idea de generar un efecto comunicacional de “hombre de gestión”, por medio de las pantallas de los medios de comunicación y redes sociales para llevar a la opinión pública aquella sensación.
En la misma sintonía se ha hecho un reclutamiento insólito, por su nivel de aprobación de ingresos de cadetes aspirantes a ingresar a la Policía Bonaerense, quienes sin una política clara y jerárquica visión a futuro se han puesto en las calles efectivos policiales mal formados, que ya han causado muertes de civiles y que no revisten cambios en la calidad de la seguridad de los ciudadanos. Según algunos datos en donde se encuentra la Policía Local la inseguridad ha aumentado.
Por su lado, el hoy presidente Mauricio Macri en campaña ha hecho un giro ideológico con las encuestas de opinión pública en mano, (elemento típico de esta época, donde las encuestas ocupan páginas de diarios importantes argentinos).Hasta ese quiebre en su postura política, en su momento el Jefe de Gobierno Porteño, manifestó la necesidad de continuar con Aerolíneas Argentinas, ANSES, YPF y Ferrocarriles Argentinos de manera estatal. Posición que no mantuvo desde sus discursos ni mediante los dirigentes parlamentarios de su espacio al momento de aprobar la estatización de aquellas empresas.
Otra de las disfunciones que plantean Debray, es lo efímero de las relaciones políticas y la Diputada Elisa Carrio podría dar testimonio de aquello. Quien destruyese el “Frente Amplio UNEN” en pocos meses, la velocidad en la que transita la política la ha puesto en alianza con el Pro, cuyo líder y fundador Mauricio Macri ha sido destratado e injuriado por “Lilita”.
Hoy el gobierno de la Alianza Cambiemos, ha realizado un alto desarrollo de la comunicación mediante las pantallas. Con un tinte algo renovador quizás, apuesta a las redes sociales como su modo favorito de comunicación para captar a nuevas generaciones y también conseguir rebotes en los tradicionales medios de comunicación como lo es la televisión.
En este articulo se ha brindando dos o tres nombres de actualidad argentina que pueden ser ejemplo de la nueva forma de actuar de los políticos, era en la que la imagen adquiere mayor relevancia que el hacer y la vocación política. Donde la clase dirigente actúa de manera a lo que dictan las encuestas de opinión pública, que no siempre son verídicas ni manifiestan intereses e ideas acordes al bienestar futuro del país.