01 Noviembre de 2016 07:13
Cualquier persona puede tener la mala fortuna de tener una enfermedad física como diabetes, cáncer, leucemia, hepatitis e incluso alguna enfermedad de transmisión sexual y no reparará en hacerse cargo del problema, enfrentarlo y tratar de solucionarlo sin tabúes, sin embargo no somos capaces de admitir y reconocer de la misma manera a las enfermedades mentales, porque nos da vergüenza y... ¿por qué? si nadie elige enfermarse ni física ni psíquicamente, ¿por qué hacer una diferencia? pero no obstante seguimos ocultando si nos sentimos deprimidos, encerrándonos ante un trastorno de bipolaridad o ataque de pánico, inclusive hoy en día, que por el ritmo acelerado en el que vivimos, esto es cada vez mas frecuente.
Kristen Bell una actriz estadounidense, protagonista de "Bad Moms" película próxima a estrenarse, donde es protagonista junto a Mila Kunis, y que, además, hemos visto en miles de películas pero seguramente la recordamos más por su personaje en la serie Veronica Mars, cuenta al programa Off Camera como afronta su enfermedad y su lucha por su salud mental:
A sus 35 años ha luchado contra la ansiedad y depresión desde muy joven; Su madre, una enfermera, al verla cumplir los 18 años la sentó y le dijo: "si tu empiezas a sentir que las cosas se tornan caóticas a tu alrededor, y sientes como si no brillara más la luz del sol, y te paralizas de miedo, esto es lo que es" tratándo de explicarle que era posible que tuviera una enfermedad hereditaria de ansiedad y depresión, y que ésta siempre ha existido por generaciones en su genealogía. Le comentó que no era más que una enfermedad, como cualquier otra, salvo que en vez de ser física y notoria, ésta enfermedad se manifestaría en su interior, pero con un tratamiento adecuado podría manejarla y tener una vida normal al igual que cualquier otra persona. Para Kristen tener una madre que le haya hablado de manera tan abierta sobre tal condición y le haya explicado tan claramente la manera en como ella reconocía en si misma tales cambios, ha sido una bendición, "ella me dijo: si tu decides seguir con la prescripción médica para ayudarte a ti misma, entiende que no tienes que sentir vergüenza por ello, porque en una comunidad médica nunca pensarían en negarle la insulina a un diabético" recuerda la actriz, y desde entonces visita a su psiquiatra regularmente y toma su medicación al sentir los síntomas de su enfermedad, porque sabe que es la forma de ayudarse a si misma a salir adelante a ser exitosa en su carrera de actriz, y tener una vida normal como madre de Lincoln Bell Shepard y Delta Bell Shepard hijos que tuvo con su esposo, el también actor Dax Shepard.
En la entrevista con Sam Jones en "Off Camera" ella admitió su lucha contra la depresión, ansiedad y su extrema codependencia, dijo: "no puedo soportar que las personas no me quieran, es una parte de mi que no puedo controlar y lo manejo con amabilidad y tratando de ser chistosa todo el tiempo, porque realmente hieren mis sentimientos cuando no les agrado" y sé que eso no es saludable, y lucho contra eso todo el tiempo."
