Este último sábado pasado, en la localidad de Pozo Hondo (Santiago del Estero) la sensación térmica llego a los 50 grados.
El intendente de la ciudad Claudio Nicolau tuvo la ocurrente idea de cocinar en el piso un huevo y cocinarlo.
Para cocinar el huevo frito no hicieron falta más de unos pocos minutos, demostrando la gran ola de calor que alcanzó la localidad.