24 Noviembre de 2015 09:25
Una joven china, Xiao Yun, de 24 años, fue detenida por la Policía de la provincia de Zhejiang durante una revisión de rutina por portar un documento falso. Lo curioso de la historia es que la muchacha había sido dada por muerta hace 10 años y fue hallada jugando al CrossFire, en un cibercafé.
Todo comenzó en 2005. Yun escapó de la casa tras una pelea con sus padres. Con el correr de los años, la joven había sido dada por muerta por su propia familia. El caso es que la muchacha alteró su identidad y no volvió a contactarse nunca con su familia.
La joven fue a llevada a una comisaría, donde se reveló que había estado viviendo en cibercafés durante la última década, según publicó la agencia RT. Sobrevivía gracias a trabajos ocasionales que encontraba en los mismos cibercafés. Allí, jugaba en línea al CrossFire.
La Policía le impuso una multa de 1.000 yuanes, alrededor de 150 dólares. Pero además, contactó a sus padres para que pudieran reunirse con su hija perdida. La madre dijo que no había cambiado el teléfono desde que la chica escapó de su casa, con la esperanza de que algún día la sorprendiera el llamado.
