La obesidad en los tiempos modernos parece ser el estado patológico más común en la población, ya sea por el ritmo de vida, la mala alimentación o una forma de vida sedentaria, todos sufrimos alguna vez tener "algunos kilos de más" y por tal motivo acudimos a dietas que prometen milagros, o que incluso pueden dañar nuestra salud.
Es importante saber que para eliminar eficazmente la grasa que acumulamos en nuestro cuerpo, primero debemos identificar cómo es que la adquirimos para así poder enfocar una dieta acorde a nuestra necesidad. Sin más preámbulos, comencemos:
Obesidad alimentaria:
Este tipo de grasa es la más común y las personas que la padecen es debido a que abusan excesivamente de la comida y del azúcar.
Se caracteriza por una acumulación de grasa en abdomen, pechos y cara.
Para poder combatirla debes reducir los alimentos y hacer al menos 30 min. de ejercicio al día.
Obesidad abdominal nerviosa:
Se caracteriza por una acumulación de grasa en la zona abdominal. Los principales motivos por los que se desarrolla este tipo de grasa son estrés, ansiedad y depresión; los que la padecen suelen sentir muchas ansias por comer azúcar.
Para eliminar este tipo de obesidad lo primero que debes hacer es controlar la ansiedad y buscar una actividad física que te libere de la presión y el estrés, además se recomienda beber un vaso de jengibre en ayunas o un jugo de vegetales enérgetico.
Obesidad glútea:
Este tipo de obesidad se presenta mayormente en mujeres durante la adolescencia, menopausia o con desequilibrios hormonales, siendo caracteristica la acumulación de grasa en piernas y glúteos.
Para combatirla trata de no pasar mucho tiempo sentada, evitar el alcohol y el cigarro; también procura hacer ejercicios focalizados durante media hora o correr más de 1 hora.
Obesidad metabólica aterógena:
Una característica de este tipo es que el vientre se mantiene inflado como, las personas que la padecen tienen ciertas dificultades en sus funciones metabólicas o por consumir alcohol en exceso. Eliminar esa grasa es muy simple, solo debes disminuir el consumo de alcohol, incluir en tu dieta alimentos que aceleren el metabolismo y practicar actividades físicas moderadas.
Obesidad circulatoria venosa:
Principalmente se acumula por genética, aparece en el embarazo o en personas con problemas de circulación; la grasa se acumula en piernas, sin llegar a ser notoria en la parte abdominal.
Para eliminar la grasa procura tomar bebidas depurativas y líquidos que te limpien la sangre y te ayuden a una circulación apropiada. Se recomienda activarse con natación o bicicleta fija.
Obesidad por inactividad:
Esta grasa se genera en personas que pasan mucho tiempo sin hacer ejercicio y abusan de ciertos alimentos hechos con harinas blancas, refinadas, azúcar refinada o endulzantes artificiales. Otra consecuencia son los horarios irregulares para comer. La clave para deshacerse de ella es no dejar largos periodos de tiempo sin probar alimento, comer 6 veces al día y practicar ejercicios cardiovasculares.
Es importante destacar que SIEMPRE es recomendable antes de comenzar con algún tipo de dieta consultar al médico de cabecera, quien te asesorará mejor en tu nueva dieta.