08 Enero de 2017 15:21
Un escenario se transforma en un lugar de reflexión, reflexión que se realiza a través de las palabras, el cuerpo, la danza y el humor.
Con coreografía de Facundo Mazzei e idea y dirección de Flavio Mendoza “Mahatma” se transforma en un espectáculo único donde los cinco sentidos realizan un viaje del cual no se vuelve de la misma manera.
Anita Martínez, Barbi Franco y Belen Pouchan cierran el círculo de figuras conocidas sobre el escenario, pero ahí no termina el talento. Bruno Sainz Micheli, ganador de combate y reconocido por el público joven también forma parte de este espectáculo donde demuestra su talento y destrezas. La comedia circense que Flavio siempre ha marcado en sus espectáculo, recurriendo a sus años de infancia y para no perder la esencia de su vida, sobre el escenario lo llevan a cabo Pietro Vicentini e Ignacio Friguglietti quienes sacan más de una carcajadas a chicos y grandes desde momentos antes de empezar el show en el Pre Acting. La música es parte esencial de la maravillosa locura que es Mahatma, allí se destaca la voz de Ana Paula Rodriguez, que comparte micrófono con Franco Friguglietti, Eliana Yanuzzi y Facundo Mazzei en distintos momentos del show.
Dentro el extenso y talentoso elenco se destacan nombres como el de Rosmery Gonzalez, la cubana que participo en la pista del bailando, Soledad Bayona quien logro con su talento mantenerse como una de las mejores bailarinas de Showmatch (en la última temporada participo con Fabio Posca) y Georgina Tirotta quien participo como bailarina en sus principios y en los últimos años brillo como coach en la pista más famosa del país.
La tecnología innovadora que presenta el escenario da el toque final a la puesta en escena, escenario giratorio, pantallas led con imágenes impactantes y el infaltable de Flavio Mendoza, una pileta con agua dan al espectador un sinfín de lugares en donde centrar su atención y permiten un disfrute único de principio a fin.
Destreza, talento, magia, dulzura, risas y la música (en vivo) son las columnas vertebrales de la nueva creación de Flavio Mendoza, pero hay una que sostiene a las anteriormente mencionadas. El amor al arte, y el deseo incondicional de ser padre.
Una obra digna de verse, donde uno, si capta el mensaje, después de verla ya no es el mismo, atrévanse a soñar, a volar, aprendan a ser almas grandes y siempre sigan su luz.
