La marca surcoreana reconoció la falla en 35 dispositivos en todo el mundo y cambiará los terminales a aquellos que representen fallas.
Samsung se vio obligada a retirar su buque insignia del mercado por reiteradas denuncias por incendio en los celulares. Esto se provocaba debido a una sobrecarga en las baterías, que también producía reinicios inesperados en los dispositivos.
El Galaxy Note 7 fue presentado el 2 de agosto en Nueva York y deslumbró con sus características. Un "phablet" de 5.7 pulgadas, con una cámara de 12 MP, 64 GB de almacenamiento con posibilidad de agregar una tarjeta Micro SD, con una excelente duración de batería (superior a su antecesor) y resistente al agua. Pero hoy mismo fue retirado del mercado, dos semanas después de su lanzamiento.
El Korea Herald? había difundido una información el 30 de agosto pasado, donde asguraba que Samsung había dejado de entregar el smartphone a las operadoras de telecomunicaciones de Corea del Sur por las reiteradas denuncias de los usuarios.
A partir del 9 de septiembre iba a expandirse su comercialización en los mercados europeos, más precisamente en la IFA, una feria electrónica que se realiza todos los años en Berlín. El terminal ya se vendía en 10 países, entre ellos Corea del Sur y Estados Unidos.
La empresa reconoció en su blog oficial que 24 de los 35 dispositivos presentaron fallas en la batería, las cuales llevaron a inutilizar los terminales, pero no reconoció ninguna de las explosiones denunciadas.
También, confirmaron que uno de sus dos proveedores fue el culpable de la falla en la celda de la batería, pero no dieron más detalles. Incluso destacaron que ya se vendieron 2,5 millones de unidades y que están dispuestos a reemplazarlos en caso de fallas, en las próximas semanas.
"Hubo un pequeño problema con el proceso de fabricación, por eso era muy difícil imaginarlo'', dijo Koh Dong-Jin, presidente de la filial de celulares de Samsung a los reporteros en conferencia de prensa. "Esto nos costará tanto, que hasta me duele el corazón. Sin embargo, la razón por la que hacemos esto es porque lo más importante es la seguridad de los clientes''.
China no se verá afectado por la suspensión de las ventas ya que su proveedor de baterías es distinto.
Esto es un revés comercial para Samsung, quien se ve forzada a tener que retirar su buque insgnia del mercado a menos de una semana de ser presentado el nuevo iPhone 7 de Apple, el 7 de septiembre próximo.