27 Junio de 2016 16:17
Son genios, talentosos, trabajadores en lo suyo. Por muchos lados son ejemplos para muchos.
Y si cometieron un error, tuvieron mala suerte, un mal día o como lo quieras llamar...¿por qué abandonar todo cuando algo sale mal?
¿Que nos queda al resto de los mortales?... que no somos excelentes en nada, ni en fútbol, ni en tatetí, ni en ajedrez, ni en castellano, ni en matemática, ni que hablar en relaciones humanas.
Mirá si Favaloro se hubiera ido ante un bochazo o nota baja que le hayan puesto en la facultad? o pensá que hubiera pasado si el Papa hubiera abandonado la Iglesia ante una mentira que pudo haber dicho y que luego se arrepintió.
¿Qué sería de los comedores infantiles, si las mujeres que los comandan hubieran renunciado porque estuvieron varios días sin harina? ¿ qué sería de los heridos si los médicos sin fronteras se fueran porque pasaron 100 días con exceso de guerras o de lastimados?
Lo difícil es perseverar, seguir ante la mala racha, insistir para vencer la mala suerte - si es verdad que existe-.
Lo difícil es seguir.
Pero estoy segura que tanto talento, tanta perseverancia que tuvieron de chicos para aprender a jugar, los hará reflexionar sobre qué ejemplo quieren darle ustedes especialmente a los más chicos.
Porque los más grandes, hacemos lo que podemos y mal que mal ya estamos hechos. Pero todos los sub-18 del país, sean hombres o mujeres aún necesitan muchos buenos ejemplos.