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Todo vuelve

03 Abril de 2017 11:06

Hoy camino a mi trabajo, (es un viaje largo el que tengo siempre y que disfruto mas allá del tráfico) pensaba, mientras iba observando a mi alrededor los autos y las gráficas que muy al pasar me detengo rápidamente a analizar (por obsesión y placer). Pensaba, "todo vuelve".

¿Cuántas veces escuchamos o dijimos esa frase? Probablemente, muchas.

Es que verdaderamente, es así. En todos sus sentidos. Todo vuelve en algún momento.

Es que lo que me llevó a este pensamiento, fue una canción que iba escuchando, y me llevó directamente a recordar a una persona que hace un tiempo se cruzó en mi camino. Este camino de incertidumbre maravillosa que vengo transitando ya hace tiempo.

En un instante recordé lo poco e intenso de las charlas que había compartido con esa persona y recaí en que, de la manera que no volvimos a hablar nunca más, fue gracias (o desgracia) a mi. A mi forma de relacionarme con él.

Los primeros días, estaba convencida que nada tenía que ver con mi forma de haberme abierto (o cerrado) a esas extensas conversaciones. Con el pasar de las semanas, entendí que eso, mi forma de hablar, tuvo mucho mas que ver de lo que me había auto convencido.

Ahí es donde nos damos cuenta que con el tiempo, todo vuelve.

De la misma manera que yo me había relacionado con esa otra persona, (que parece que no le gustó o no era lo que le hacía bien), fue como a mi, al poco tiempo, me trataron.

Ahí es donde recordé y entendí que si vamos por la vida convencidos de que, lo que creemos y cómo lo creemos, es la manera mas correcta, caemos en una dificultad desequilibrada de relacionarnos.

Todo vuelve, pensé. Y ¿por qué no a mi?

A mi también me deberían hacer sentir lo mismo en algún momento...lo mismo que hice sentir a otra persona. Y así lo sentí. Y así lo entendí.

Todo vuelve.

Reflexión.

Cuidemos las formas en que nos tratamos con quienes nos relacionamos. Sea esa persona, alguien que nos gusta o no, sea alguien que conocemos de hace años o no, sea alguien que amamos y ya no. Sea una amistad o alguien pasajero. Sea quien sea que se cruce en tu vida, en estos momentos donde el valor agregado está casi invisible, cuidemos las formas. Porque, todo vuelve.