A pesar de las repercusiones que tuvo la foto del niño sirio muerto en la plata, esta guerra amenaza no solamente a los millones de personas que viven en Siria sino también a toda una nueva generación.
Si tenemos en cuenta las razones de este conflicto llegamos a una conclusión que nos lleva no solamente a ideales religiosos y matanzas que atacan a las personas y a sus ideales, sino también a un pensamiento o fanatismo que en cierto punto puede desencadenar sucesos realmente lamentables para todo el mundo.
Actualmente el grupo terrorista ISIS (Estado Islámico) se ha visto involucrado en decapitaciones de periodistas, ataques con toma de rehenes en Europa y despliegue bélico en el norte de África y Medio Oriente.
Estos conflictos nos llevan a todos a reflexionar sobre las consecuencias de estos "excesos religiosos" que representan la intolerancia cultural adoptada por cada persona en el mundo; un ejemplo es la destrucción de las iglesias en Siria de parte del estado Islámico.