La vida de los mutantes es muy difícil. Eso ya lo sabemos. Desde la Trilogía original dirigida por Bryan Singer y Brett Ratner - solo la ultima - hasta los innumerables Spin - Off y sus correspondientes secuelas.
Para 2011 se inicio la trilogía precuela con X - Men: Primera Generación que permitió, a medias, conocer los orígenes de Charles Xavier (James McAvoy), Erik Lehnsherr (Michael Fassbender); entre otros jóvenes mutantes.
En X - Men: Apocalipsis el entramado grandilocuente que habíamos visto con Días del futuro pasado queda eliminado. Aquí la trama se despega un poco de Xavier, Erik y de Mystique (Jennifer Lawrence) y nos concentramos más en el villano de turno: En Sabah Nur (Oscar Isaac) un super mutante encargado de traer el Apocalipsis al mundo, junto con sus cuatro jinetes del Apocalipsis (Fassbender, Olivia Munn, Alexandra Shipp y Ben Gardy)
Por otro lado en el Instituto Xavier para Jóvenes Talentos nuevos estudiantes llegaran a la camada ya conocida. Desde un precoz Scott Summers (Tye Sheridan) y una retraída Jean Grey (Sophie Turner, la Sansa Stark de Juego de Tronos) hasta el tímido Nightcrawler (Kodi Smit-McPhee).
A veces sucede que una película se centra en un solo personaje que queda desvirtuada la idea. Sera que hemos tomado a Wolverine (Hugh Jackman) como el mutante por excelencia que olvidamos a otros igual de importante. A diferencia con su película inaugural dirigida por Matthew Vaughn, Singer - quien ya se había encargado de la segunda parte - le da una impronta más interesante. Intenta volver a las raíces de Vaughn y dar un proyecto más cercano a lo que vimos 5 años atrás.
A pesar de no ser una fiel adaptación de los comics como su predecesora, si logra presentar momentos de increíble impacto y belleza fotográfica. La secuencia de los créditos iníciales mostrando un túnel cronológico desde el Antiguo Egipto, pasando por la crucifixión de Jesús y el nazismo, hasta la actualidad es perfecta; y nos da breves indicios que veremos un film que, tal vez carezca de originalidad y poco desarrollo de los nuevos personajes. Pero si es profunda en dramatismo, con un villano que para muchos fue tema de debate. Para los menos pretenciosos estuvo, con lo justo, a la altura de las circunstancias. Pero que no es el pastiche ya visto en otras versiones.
Solo le resta ajustarse al asiento de la butaca del cine, y hacer un nuevo viaje a la Mansión X con sus mutantes favoritos.