Después de aquella fatídica noche ante el Chapecoense brasileño, cuando cometió múltiples errores que de todas formas no impidieron la clasificación de River, Eder Álvarez Balanta profundizó aún más su silencio ante los micrófonos.
Aquel 28 de octubre, el zaguero fue reemplazado a los 17 minutos del segundo tiempo, por una supuesta molestia. Desde entonces, el colombiano se llamó a silencio.
La imagen del defensor desconcertado en el banco.
En la últimas horas hizo la excepción ante ESPN Radio, cuando confesó que “estuve desconectado del partido. Sabía que si seguía en cancha podía perjudicar más al equipo". Para el defensor, “sería una buena opción dejar que otro entrara con las mismas ganas e hiciera las cosas bien”.
En relación s su decisión de no declarar desde entonces, confesó que habló con el DT Marcelo Gallardo, quien “entendió la posición que tuve. Siempre me demostró respaldo, tanto en la parte anímica como en el aprendizaje”.