Bajo un marco extraordinario de hinchas argentinos que colapsaron el estadio Lusail, el mayor escenario de Qatar con 88.966 localidades, al ritmo de "Muchaaaaachos", la Selección Argentina, ese equipo comandado por Lionel Scaloni y liderado en la cancha por Lionel Andrés Messi, ingresó al verde césped con un objetivo claro: avasallar a la Francia de Kylian Mbappé y, por tercera vez consecutiva, gritar "Campeón del Mundo".
Para ello, el DT santafesino hizo un cambio respecto al que paró ante Croacia por la semifinal, aunque mantuvo el esquema con cuatro volantes. El que se ganó un lugar para ir desde el arranque fue Ángel Di María, tal y como había ocurrido en la final de la Copa América en Brasil en el Maracaná, y reemplazó de Leandro Paredes. Además, Nicolás Tagliafico volverá a repetir la titularidad por Marcos Acuña, quien presentó una molestia en la previa al encuentro.
De esta manera, la Scaloneta se paró en la cancha con cuatro defensores, cuatro mediocampistas y dos referencias de ataque con la idea de explotar la mayor debilidad que mostró Francia a lo largo de la Copa del Mundo: su última línea, sobre todo los laterales. Argentina salió así: Emiliano Dibu Martínez; Nahuel Molina, Cristian Cuti Romero, Nicolás Otamendi, Nicolás Tagliafico; Ángel Di María, Rodrigo De Paul, Enzo Fernández, Alexis Mac Allister; Lionel Messi y Julián Álvarez.
Lo primero que hizo Francia al sacar del medio fue tirarle un pelotazo a su gran estrella, Mbappe, lo que reflejaba lo que iba a ser su estrategia a lo largo del encuentro. Además, el conjunto de Didier Claude Deschamps comenzó los primeros minutos del encuentro presionando la salida de la albiceleste, en su afán de forzar un error que le permitiese abrir el marcados. Por su parte, los muchachos de Scaloni explotaban el costado izquierdo con Di María.
Así se forjó la primera jugada de riesgo. A los 2 minutos, Fideo tira un centro forzado, la pelota le quedó a los pies de Messi, quien abrió para De Paul y este habilitó a Julián Álvarez. quien no llegó a rematar y la pelota quedó en las manos de Hugo Lloris. Casi tres minutos después, con una suerte de taco el ex delantero de River dejó a Mac Allister frente al arco y el ex Argentinos Jr no lo dudó: remató de media distancia a los brazos del arquero francés.
A los 7 minutos, De Paul amagó, hizo pasar a los centrales franceses y disparó mordido. la pelota dió en Raphaël Varane y terminó en el tiro de esquina. Diez minutos más tarde, la presión argentina -que durante los primeros 20 fue muy superior a Francia- surtió efecto. El balón le quedó a Messi, quien lideró el ataque y abrió la pelota a la derecha para De Paul. El volante del Atlético Madrid tiró un centro raso que conectó Di Maria y su disparo se fue muy desviado.
¿De Francia? solo un tiro libre ejecutado por Antoine Griezmann a los 19 minutos que conectó de cabeza Olivier Jonathan Giroud. Sin embargo, la jugada fue invalidada por falta en ataque del delantero del Milán. A los 21 minutos llegó la primer polémica del partido. Julián Álvarez se la pasó por izquierda a Di María, quien encaró y gambeteó a Masour Ousmane Dembélé. El atacante del Barcelona lo embistió dentro del área y el polaco Szymon Marciniak marcó la pena máxima.
Lionel Messi abrió el marcador
El encargado de ejecutar el disparo desde los doce pasos fue el capitán argentino, el gran Lionel Messi, quien remató a su derecha, Lloris fue para su izquierda y abrió el marcador. Con la ventaja, la Argentina comenzó a circular con velocidad la pelota y la figura de La Pulga comenzó a crecer cada vez más. Por su parte, Francia se mostraba impreciso, no generaba juego y sus líneas se venían muy distantes entre sí.
La superioridad de la Argentina fue tal que el segundo no tardó en llegar. A los 36, Molina se la da a Messi y el "10" hizo el resto. Gran habilitación para Julián Álvarez que puso a correr a Mac Allister, quien a su vez se la dejó servida a "Angelito" que no falló y marcó el 2 a 0. La Argentina era más, durante todo el primer tiempo disminuyó hasta su máxima expresión al actual campeón del mundo y, con gran justicia, estiró la ventaja para que el delantero de la Juventus explote en lágrimas.
Di María marcó un golazo y puso el 2 a 0
La desesperación de Francia era inmensa. Incluso, a 5 minutos de terminar la primera mitad, Deschamps decidió hacer dos cambios: salieron Dembélé -el autor del penal- y Giroud, ingresaron Randal Muani y Marcus Thuram. Igualmente no hubo tiempo para más (a pesar de que el juez dio 7 minutos adicionales) y la primera parte de la gran final terminó con un dominio total de la Scaloneta, la cual merecidamente se fue al descanso demostrándole al mundo que es un equipo de temer.La segunda parte arrancó similar a lo que se fue dando durante el primer tiempo: una Francia muy imprecisa, con pelotazos a un Mbappe desaparecido y una Selección Argentina concentrada, presionando y ganando en todas las líneas. A los 48 minutos, Otamendi presionó y robo. La pelota le quedó a Di María, quien le metió un gran centro a la carrera a De Paul. El ex Racing probó de volea a las manos de Lloris.
Todo era de la Scaloneta, la cual ante una muy pálida versión de Francia demostraba granas, corazón y juego. A los 58, la Argentina salió de contra, Di María se la dio a Julián Álvarez y el atacante del Manchester City exigió con un buen remate rasante la buena respuesta del portero francés. Un minuto después, el delantero de la Juventus sacó a bailar a Jules Olivier Koundé, tiuró el centro, Julián la dejó pasar y Messi casi marca el 3 a 0.
A los 62, Messi habilitó a la carrera al ex delantero de River, quien puso mano a mano a Mac Allister contra Lloris. Lamentablemente, Upamecano alcanzó al ex Argentinos Jr y la pelota fue despejada por el arquero francés. Un minuto después, Di maría -la gran figura de la cancha- fue reemplazado por Marcos Huevo Acuña. El hambre argentino se notaba a simple vista y, por momentos, era hasta conmovedora la actitud de los muchachos de Scaloni en cada jugada.
Con pocas ideas, simplemente con el impuso lógico de esta perdiendo, Francia comenzó a tirar centros al área del Dibu Martínez. Pese a esto, siempre encontraron bien parados a los dos centrales argentinos: Cuti romero y Nicolás Otamendi, de enorme tarea durante toda la Copa del Mundo. El primer remate del campeón del mundo del 2018 llegó recién a los 70 minutos del partido. Mbappe amagó dos o tres veces y tiró la pelota muy por encima del travesaño.
Sin embargo, Argentina iba e iba. A los 71, Messi volvió a hacer de las suyas y después de varios amagues, se la dejó a Enzo Fernández. El volante del Benfica quiso hacer el gol de su vida y la pelota quedó en las manos de Lloris. La presión de la Scaloneta era constante, sofocante por momentos y cumplía con creces lo que pedía su DT. De hecho, a los 77 De Paul desbordó y tiró un centro que fue interceptado por Lloris. ¿De Francia? nada y menos que nada hasta que a los 78, los centrales se distrajeron y Muani fue derribado dentro del área por Otamendi. Una vez más, el polaco Szymon Marciniak marcó la penal máxima y a pensar de la buena reacción del Dibu, Mbappé marcó el descuento.
Mbappe puso el 2 a 1 de penal
Mbappe marcó un golazo y empató el partido
Un minuto después, la Argentina recibió el golpe, Mbappé volvió a recibir solo y, con la categoría que lo caracteriza, puso el 2 a 2 de volea. En un minuto, Francia hizo lo que no pudo en 80. El desconcierto era total. A pesar de haber dominado casi en su totalidad el encuentro, en un breve lapso del tiempo el seleccionado francés demostró porqué es el vigente campeón e igualó el partido. A los 94, los galos casi ponen el 3 a 2, pero el Dibu evitó una nueva caída de su arco.A los 96, Argentina reaccionó. Messi encargó, remató de larga distancia y Lloris, de grandes reflejos, descolgó lo que era el gol de la victoria argentino. No hubo tiempo para más y la final se fue a la prórroga. Los primeros 15 minutos fueron muy igualados. Jugadores como De Paul, Julián Álvarez y el propio Messi sintieron el desgaste y, sobre todo, el empate de Francia. Las piernas pesaban más de la cuenta y el primer objetivo era volver a alejar a los galos del área.
Para ello, Scaloni decidió el ingreso de Lautaro Martínez, por Julián, y Leandro Paredes, por Rodrigo de Paul. A los 104, Messi encargó, hizo una pared con Mac Allister y se la dio al "Toro", quien se demoró dentro del área y le permitió a los centrales salirle al cruce. La pelota le quedó a Montiel, que metió un gran remate que se desvió y se fue al tiro de esquina. Un minuto después, Acuña dejó mano a mano al ex atacante de Racing que, una vez más, falló.
Cuando se disponía a convertir, Lautaro fue interceptado por la defensa de Francia y la pelota se fue al córner, a pesa de que el árbitro marcó el saque de arco. Durante los últimos minutos de la primera parte de la prórroga, la Argentina levantó la cabeza y, por mala fortuna, no pudo convertir su tercer gol del partido. A los 108 llegó el milagro, Lautaro se la bajó a Messi, Lio a Paredes y Paredes se la dio a un Lautaro habilitado.
Messi, sí, Messi marcó el tercer gol
Otra vez de penal, Kylian Mbappé igualó la Final. 3 a 3
El delantero del Inter remató, Lloris dio rebote y apareció el "10", quien la empujó al gol e hizo delirar a todo el estadio qatarí. Sí, Argentina, con huevo, corazón, garra y, sobre todo, fútbol, metió el gol que necesitaba para gritar campeón. Sin embargo, no estaba todo dicho. Una vez más, el árbitro polaco marcó la penal máxima a favor de Francia y, Mbappé volvió a iguala el trámite. La última la tuvo ambas Selecciones. Primero, el gran Dibu Martínez le tapó un terrible mano a mano a Muani. La réplica no tardó en llegar, Messi puso a correr Montiel, quien centró y Lautaro, de cabeza, le erró al arco. No hubo tiempo para más y la final se definió en los penales. Desde los doce pasos, el gran Dibu Martínez volvió a aparecer; Coman, Tchouaméni erraron. Mbappé, Messi, Dybala, Paredes, Muani y Montiel convirtieron los suyos y la Argentina, por tercera vez, se coronó como Campeón del Mundo.(PARTIDO EN DESARROLLO)