Durante cuatro días consecutivos, Alejandro Burzaco, ex CEO de Torneos y Competencias, mencionó apellidos, cifras y formas de pago. Se trató de dinero en concepto de coimas que entregó a dirigentes de la Conmebol y el fútbol argentino a cambio de obtener los contratos de televisación de mundiales, Copa América, Libertadores y Sudamericana, y la liga nacional.
La ruta de la coima, cuya cabeza -siempre según la declaración de Burzaco- era Julio Humberto Grondona, tiene ramificaciones en todo el continente sudamericano e incluye hasta el astro del fútbol mundial actual: Lionel Messi.
Burzaco declaró por cuatro días consecutivos en Brooklyn.
"A Grondona le llevábamos los dólares en efectivo en una bolsa o en un sobre a su casa, o se lo dábamos a su secretario privado, o a su chofer, o se lo depositábamos en una financiera de su preferencia en Argentina. Esta entidad era Alhec Tours", puntualizó el empresario. Así comenzó a relatar el empresario la extensa red de coimas que pagó al ex presidente de la AFA por ocho años.
Alhec Tours sirvió, según Burzaco, como "cueva" y está sospechada de ser la entidad a través de la cual se giraba dinero al exterior. Hacia allí transfería el dinero Torneos & Traffic Sports Marketing LTD (con sede en las Islas Caimán), que luego llegaba a las manos de Grondona, en ocasiones en efectivo.
En rigor, Burzaco sostuvo que le pagó coimas a Grondona desde 2006 hasta la muerte del histórico dirigente de la AFA, la Conmebol y la FIFA, en julio de 2014. El ex mandatario del ente madre del fútbol argentino luego distribuía el dinero "a su criterio y según sus preferencias". En los primeros años el empresario le pagó US$ 600.000 anuales y luego, a partir de 2012, la cifra ascendió a 1.200.000 dólares. Sin embargo, en determinados casos se pagaron coimas exorbitantes que ascendían hasta los 15 millones de dólares, de acuerdo al torneo por el cual se estuviera negociando.
En el segundo día de interrogación, Burzaco reveló que pagó 15 millones de dólares por dos mundiales (los de 2026 y 2030), campeonatos que aún no tienen sede definida. El empresario contó bajo juramento ante el fiscal Sam Nitze que, junto a la cadena brasileña Globo y la mexicana Televisa, "acordaron repartir la carga" para abonarle a Grondona, en ese entonces representante de Sudamérica en el seno del Comité Ejecutivo de la FIFA, ese monto con el objetivo de obtener los derechos de ambos torneos. El mismo se hizo a través del banco suizo Julius Baer.
Grondona, el principal mencionado por Alejandro Burzaco.
Lo cierto es que Grondona no es el único dirigente sudamericano mencionado por Burzaco. La lista es extensa y compromete a apellidos de peso de la Conmebol, quienes recibieron el dinero a cambio de otorgar contratos para las Copas América, Libertadores y Sudamericana.
Según Burzaco, Nicolás Leoz, ex presidente de la Conmebol, recibió u$s 600.000 por cada edición de la Copa Libertadores y luego el monto subió a un millón de dólares hacia finales de los años 2000. Luego de esta explosiva declaración, el paraguayo podrá ser extraditado a Estados Unidos para declarar en el marco de la investigación por supuesto lavado de dinero.
Por otra parte, el argentino reveló que él mismo era el encargado de pagar las coimas a diferentes dirigentes como el paraguayo Juan Ángel Napout (ex presidente de la Conmebol), quien habría cobrado las coimas entre 2010 y 2015, al ex presidente de la Federación Peruana de Fútbol Manuel Burga y José María Marin, el ex titular de la Confederación Brasileña de Fútbol.
Burzaco dijo que pagó sobornos en total por USD 4,5 millones a Napout, USD 2,7 millones a Marin, y USD 3,6 millones a Burga.
En cuanto a las coimas pagadas por la copa Libertadores y Sudamericana, los dos torneos más importantes de América Latina, Burzaco mencionó a Eduardo Deluca (secretario general de la Conmebol), dirigente de defensores de Belgrano, y a José Luis Meiszner, ex secretario general de la Conmebol e histórico dirigente de Quilmes, íntimamente vinculado con Aníbal Fernández, ex jefe de Gabinete K que también tendría conexiones con el caso a través de la pata local del negocio.
Meiszner junto a Aníbal Fernandez.
Además, Grondona también habría acordado coimas por la Copa Libertadores y la Sudamericana, tres ediciones de la Copa América (2015, 2019 y 2023) y la Copa Centenario. En ese sentido, Burzaco sostuvo que Grondona cobró 3.000.000 de dólares por el torneo de 2015 y tres millones más "por única vez" por firmar un contrato con Datisa S.A. Según las cifras que dio el ex ejecutivo de Torneos y Competencias, las coimas acordadas a través de Datisa por la Copa América llegaron a US$ 81 millones de dólares.
Burzaco reveló que los pagos también conectaban a quienes denominó sus “socios”, una extensa lista de firmas internacionales que también habrían acordado y entregado dinero. "Teníamos varios socios en distintas partes del mundo, como Fox Sports en Estados Unidos, Televisa en México, Media Pro en España, TV Globo en Brasil, Full Play de Argentina, Traffic, que tiene sede en Brasil, pero a través de una sucursal en Miami. Éramos socios con el grupo Clarín en Argentina. Teníamos muchos socios y distintas asociaciones en diferentes partes del mundo", expresó. Buen número las firmas mencionadas emitieron comunicados desmintiendo sus dichos.
Delhon se suicidó tras ser mencionado por Burzaco.
En el ámbito local, los sobornos por el Fútbol Para Todos rozaron al kirchnerismo. Burzaco mencionó que abonó 4 millones de dólares a Jorge Delhon (abogado que brindaba una asesoría en el programa estatal) y Eduardo Paladino (coordinador del FPT), íntimamente conectado con Aníbal Fernández. Por aquellos años, los jefes de gabinete K, quienes autorizaban los pagos a la AFA, eran Jorge Capitanich (2013 - 2015) y Juan Manuel Abal Medina (2011 - 2013). Delhon se suicidó luego de escuchar las acusaciones.
Como si fuera poco, Alejandro Burzaco testificó que Torneos le pagaba a Lionel Messi y a "otros jugadores" de la selección US$ 200.000 por partidos amistosos, adicionales a lo que cobraban de la AFA. Lo hacía para que accedieran a participar de los encuentros.