Brian Fernández fue suspendido por tres meses, por un positivo en el control antidóping del 10 de mayo. Fue en el partido que Racing igualó sin goles ante River en el Monumental.
La sanción en el fútbol local caducará el 3 de septiembre.
Además, se espera una sanción de la Conmebol, ya que también apareció la misma sustancia prohibida en otro control. esta vez, fue en el encuentro que su equipo jugó ante Guaraní por la Copa Libertadores.
El presidente Víctor Blanco negocia que no lo suspendan por dos años, como se estaría impulsando en el seno del órgano sudamericano.
El ex jugador de Defensa y Justicia admitió consumir una droga social (sería cocaína) pero oficialmente no lo han informado desde el Tribunal de disciplina de AFA.
Fernández ya había dado un indicio durante la semana previa faltando a la práctica, argumentando un problema de salud, que no existió.
La crisis que vive el jugador excede la esfera deportiva. Sufre una depresión que lo llevó a caer en la tentación de las drogas.
Su hermano, Leandro Fernández, quen juega en Godoy Cruz, admitió que Brian está golpeado por la muerte de otro hermano que se suicidó en 2012. “Compartía mucho tiempo con él, y no lo ha superado”, admitió.
Dicen en el entorno del jugador que esa muerte fue un quiebre en su carrera, que saltó con un gran rendimiento en Defensa y Justicia, que lo hizo saltar a Racing. La tragedia familiar le hizo bajar el rendimiento y cambiar el foco de su vida.
El jugador espera una sanción de la Conmebol por otro doping postivo.
Al combo explosivo se le sumó otro problema. Hace algunas semanas, circuló la versión de una denuncia de su ex mujer, madre de su hija, quien lo acusó de golpearla y agredirla en su casa de Florencio Varela durante la semana del 20 de junio.
La mujer había abandonado el departamento que compartían en Puerto Madero.