Todos los cracks del deporte tienen manías raras, pero la de Novak Djokovic es muy una extraña. Tanto, que desacredita el análisis de otro grande del tenis como Guillermo Vilas, el mejor tenista argentino de la historia: “El pasto es para las vacas”.
Pero el mejor tenista de la actualidad come césped: fue su cábala cada vez que conquistó Wimbledon.
Mirá el loco festejo
El serbio, que ya ganó tres veces el torneo británico, contó que "de niño soñaba con ganar Wimbledon y con hacer locuras cuando lo lograra, por eso lo hago. Estaba muy, muy bueno este año. No sé qué hicieron los responsables del césped, pero estaba buenísimo", resaltó sonriente el tenista que logró su noveno Grand Slam.