12 Noviembre de 2017 11:15
El lunes 27 de junio de 2016 los argentinos amanecieron con la peor noticia futbolística que podían escuchar: Lionel Messi había renunciado a la Selección, luego de la segunda final perdida con Chile por la Copa América. "Ya está. Se terminó para mí la Selección", confirmó a la salida del estadio.
Messi renunció en junio de 2016 tras perder la final de la Copa América.
Nadie lo podía creer. Y las repeticiones de la entrevista colmaron todas las señales televisivas. “Ya lo venía pensando. Ya son cuatro finales, no es para mí. Lamentablemente lo busqué, era lo que más deseaba, no se me dio”, explicaba la “Pulga”.
En efecto, pasaron 45 días exactos hasta que el delantero recibió en Cataluña al por entonces flamante director técnico, Edgardo Bauza. Fue allí que el “Patón” los convenció a Messi y a Javier Mascherano de regresar al equipo. Pero lo que nadie sabe es cómo vivió el capitán del equipo esas seis semanas.
El día que Messi renunció a la Selección
“Fue un cúmulo de cosas que me hicieron llegar a esa decisión, que era real y que la sentía. Pero después pensaba en un partido de la selección en el que no estaba; y me llamaba. Y quería estar otra vez. Y me daba vergüenza decir que quería estar otra vez”, reveló Messi en una entrevista a DirecTv Sports.
Consultado por el momento preciso en el que se arrepintió, la “Pulga” sumó: “No me acuerdo exactamente, pero fue un arrepentimiento muy rápido. Lo pude pensar de otra manera, más frío. Y me daba vergüenza por la decisión que había tomado, porque en ese momento era lo que sentía, era verdeara. Pero quería volver a estar”.
Por último, el capitán del equipo destacó la charla que mantuvo con Bauza y la reacción de sus compañeros: “El 'Patón', en su momento, y los compañeros me hicieron todo más fácil”.