Si bien el partido entre Argentina y Croacia venía transitando por carriles parejos y sin resolución visible. Sin embargo, un error clave de la Selección desmoronó el planteo y selló su destino.
Así, a los ocho minutos, Gabriel Mercado le pasó la pelota al arquero Wilfredo Caballero quien, al intentar devolvérsela, falló y se la dejó servida a Ante Rebic, quien anotó de volea el primer gol del partido.