28 Junio de 2016 05:43
La posible salida de Lionel Messi de la Selección podría representar un importante golpe económico para las debilitadas arcas de la AFA. En los últimos años el ente madre del fútbol argentino rubricó millonarios contratos debido a que el rosarino es la cara visible del conjunto nacional, aunque esa situación ahora corre riesgo.
La posible despedida de Messi de la Selección podría traer aparejado pérdidas millonarias.
“En materia de ingresos, Messi representa el 40 o 50 por ciento, y en lo futbolístico también”, manifestó en 2013 el ex presidente de la AFA, Julio Grondona. Y con toda razón. Es que desde que el "10" del Barcelona se convirtió en la principal estrella mundial de fútbol, los contratos por amistosos y publicidad crecieron tanto como su volumen de juego.
Algunos dirigentes ya hacen cuentas y estiman que de concretarse la salida de Messi, la Asociación del Fútbol Argentino podría perder en los próximos años unos US$ 200 millones. Incluso, la AFA rubricó contratos por la presencia del astro en el mundial de Rusia 2018, que podrían ser cancelados si éste desiste de usar la camiseta albiceleste.
Además, la marca alemana que viste tanto a la Selección como a Messi abona un plus extra por cada partido que disputa el "10" rosarino con la albiceleste. Este extra de dinero quedaría fuera de circulación si se confirma la noticia.
Incremento por amistosos
El 17 de agosto de 2005, todo cambió para la AFA. Fue el día en que Lionel Messi hizo su presentación con la Selección mayor en un amistoso ante Hungría. A partir de allí las propuestas para organizar amistosos crecieron diez veces, según consignó Ámbito Financiero.
Messi, clave adentro y fuera de la cancha.
Guillermo Tofoni, de la empresa World Eleven, encargada de pactar estos encuentros, aseguró que "antes Argentina cobraba por cada amistoso 150 mil, 200 mil o 300 mil dólares” y que ahora “no baja del millón". Excepto que Messi no pueda disputar el encuentro por problemas físicos, el monto a cobrar disminuye entre un 30 y 40 por ciento.
La renuncia de Messi llega en medio de una profunda crisis institucional de la AFA, con cuentas en rojo y un déficit millonario, por lo que su ausencia no sólo generará un problema futbolístico para Gerardo Martino, sino un fuerte cimbronazo económico para el fútbol argentino.
