España se convirtió en el primer finalista del Mundial de básquet China 2019: en un partido apasionante que requirió dedos tiempos suplementarios para quebrar la paridad, derrotó a Australia por 95 a 88 y enfrentará al vencedor de Argentina-Francia, que se miden por un lugar en la final. España corrió "de atrás" un partido que le fue adverso durante la mayor parte del tiempo, pero logró sacarlo adelante gracias a un imparable Marc Gasol, que marcó 33 puntos.El equipo ibérico irá por su segundo título mundial: el anterior fue en 2006, en Japón.
Por el lado de los australianos, la figura fue Patty Mills, con 34 tantos. La rivalidad entre ambas selecciones es grande: en los juegos olímpicos de Río de Janeiro, hace tres años, se habían enfrentado por la medalla de bronce. Entonces también se habían impuesto los españoles, con un agónico 89-88.