Una triste noticia sacudió al mundo River este miércoles: Gustavo Insúa, el chofer del micro que traslada al plantel profesional del Millonario, murió tras haber dado positivo de coronavirus y permanecer varios días internado en estado grave en el Hospital Municipal de Trauma y Emergencias Dr. Federico Abete, de Pablo Nogués. De hecho, el hombre había sido inducido al coma farmacológico luego de que su salud empeorara notablemente en los últimos días.
Según su familia, el último viaje que había hecho Insúa con el equipo fue el jueves 13 de mayo, cuando fue a buscar al plantel al regreso del viaje a Barranquilla, Colombia. El día anterior, River había igualado ante Junior 1 a 1 y los dirigentes del club de Núñez no dudaron en afirmar que el brote del virus que afectó a gran parte del plantel profesional se originó en tierras cafeteras.
Días más tarde, antes de que River enfrentara a Boca en La Bombonera por los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional, Insúa dio positivo de COVID-19. El chofer solía manejar el ómnibus de la empresa Vía Bariloche que traslada a los jugadores dirigidos por Marcelo Gallardo y desde el club señalaron que el último partido en el que había trabajado Insúa había sido ante Banfield, el 2 de mayo.
Sin embargo, el entorno de Insúa sostiene que el chofer había trasladado al plantel desde el aeropuerto de Ezeiza al predio de esa misma localidad bonaerense cuando volvió del partido con Junior en Barranquilla, por la Copa Libertadores, el 13 de mayo, antes de que se desataran los contagios masivos previos al encuentro con Boca. Fue en ese viaje a Colombia cuando, según los dirigentes del millo con Rodolfo D'Onofrio a la cabeza, el plantel de River se infectó.
Insúa era empleado de la empresa Vía Barilochee ingresó al establecimiento médico a la semana siguiente del 13 de mayo, cuando se produjeron los contagios masivos dentro del plantel de River: se encontraba en grave estado de salud y en las últimas 48 horas fue inducido en un coma farmacológico e intubado,debido a las dificultades para respirar que le ocasionaba la enfermedad.
El lunes, de los primeros 15 jugadores que se habían contagiado de coronavirus y no pudieron jugar ante Boca por la Copa de la Liga Profesional, 13 de ellos recibieron el alta epidemiológica y se sumaron a los entrenamientos del plantel. De hecho, muchos de ellos fueron titulares ante la drástica caída del conjunto de Núñez ante Fluminense por la fecha final del Grupo D de la Copa Libertadores.
Si bien River necesita al menos un empate para avanzar a los octavos de final, el equipo de Gallardo cayó por 3 a 1 en el Monumental. A pesar de esto, gracias al empate de Junior de Barranquilla ante Independiente de Santa Fe logró acceder a los octavos de final de la Libertadores, donde podría ser rival de Palmeiras, Fluminense, Racing, Argentinos Juniors o Atlético Mineiro, entre otros.
Del total de contagiados en River, José Paradela y Fabricio Angileri fueron los últimos en dar positivos, se recuperaron Franco Armani, Javier Lux, Franco Petroli; Robert Rojas; Tomás Castro Ponce, Santiago Simon, Agustín Palavecino, Bruno Zuculini, Nicolás De La Cruz; Matías Suárez, Benjamín Rollheiser, Federico Girotti y Rafael Santos Borré. Todos ellos ya superaron el coronavirus y fueron autorizados por el cuerpo médico para retomar la actividad física.