En los últimos días, las alarmas se encendieron en el cuadro de Avellaneda. El defensor de Independiente, Hernán Pellerano, se había retirado en medio de un entrenamiento con vómitos, cefalea y dolor abdominal, síntomas típicos del dengue.
Sin embargo, este martes llegaron los resultados de los análisis realizados al jugador y descartaron toda posibilidad de que padezca la enfermedad transmitida por los mosquitos.
El zaguero central es una de las piezas clave para el equipo de Avellaneda.
A causa de los síntomas, Pellerano no pudo estar presente en el partido que se disputó el pasado domingo entre Independiente y Belgrano. “Por suerte me siento mucho mejor, me bajó muchísimo la fiebre y se fueron los dolores abdominales", reconoció el zaguero.
La situación había puesto en alerta al médico del plantel rojo, Luis Chiaradía, quien le realizó un extenso análisis clínico para confirmar si el jugador presenta la enfermedad.
Pellerano rocíen podría jugar en la tercera fecha.
Esta mañana, llegaron los resultados de los exámenes virales y la buena noticia invadió el vestuario del equipo de Avellaneda: se descartó que el defensor tenga la enfermedad del dengue.
De todas formas, Pellerano perdió peso durante su estado febril y experimenta cierta sensación de debilidad, por lo que no estaría presente en la segunda fecha del campeonato.