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Juegos Paralímpicos: el asombroso jugador de tenis mesa que no tiene brazos

Ibrahim Hamato es un jugador egipcio de tenis mesa que demuestra que todo se puede superar. Tuvo un accidente de pequeño y perdió sus dos brazos, pero esto no le impidió cumplir sus sueños.

14 Septiembre de 2016 15:30
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Sí, se puede. Ibrahim Hamato, un jugador egipcio de tenis mesa, demuestra que la eslogan de cabecera de Barack Obama (y también de Mauricio Macri) puede ponerse en práctica en todos los ámbitos.

El egipcio que sorprendió a todos en los Juegos Paralímpicos.

Hamato saltó a la fama en los últimos días, por su participación en los Juegos Paralímpicos de Río 2016. Pero ¿qué es lo que caracteriza a este deportista?

El egipcio juega al tenis mesa y le faltan los dos brazos. Muchos se preguntarán cómo hace para agarrar la paleta, y la respuesta es increíble: Hamato la sostiene con la boca.

Qué le pasó

El deportista perdió los 2 brazos en un accidente automovilístico, a los 10 años, pero esto no fue impedimento para practicar el tenis de mesa.

A pesar de que muchos se hubiesen frustrado, Ibrahim creyó en él mismo y logró cumplir su sueño: "La discapacidad no está en los brazos o piernas... la discapacidad es no creer en lo que querés hacer", aseguró el jugador en un video de la Federación Internacional de Tenis de Mesa (ITTF).

Y el esfuerzo dio sus frutos.Hamato creció tanto en el ambiente del tenis de mesa que llegó a los Juegos Paralímpicos (evento para atletas con discapacidades físicas, mentales y/o sensoriales) que se están desarrollando actualmente en Brasil. 

En la categoría individual de los Juegos Paralímpicos, el jugador terminó undécimo. Pero hoy tiene otra chance: comienza su participación por equipos contra República Checa.

"Tres años después de mi accidente intenté jugar con la paleta debajo del brazo, pero no funcionó. Intenté varias opciones hasta que lo hice con la boca", contó Hamato a la hora de relatar su historia de vida.

Y, para finalizar, dejó un consejo: "Espero que esto le muestre a la gente que nada es imposible, siempre y cuando uno trabaje duro".