La Copa Sudamericana, que tiene a River como actual campeón, fijó cruces llamativos para los equipos argentinos que siguen con vida en el certamen.
El caso más rutilante es del actual defensor del título. El Millonario enfrentará a los brasileños de Chapecoense, el equipo más ignoto de la Copa.
El equipo brasileño quiere seguir el camino hasta la final como Goias.
Es un equipo desconocido y sin historia internacional. Fue fundado en 1973 y volvió a la Primera División después de 35 años. Pertenece a la ciudad de Chapecó, en el estado de Santa Catarina.
En 2001 sufrió una crisis económica y decidió cambiar el nombre y denominarse Associação Chapecoense Kindermann/Mastervet.
El Arena Condá, estadio de Chapecoense, que tiene capacidad para 21.500 personas.
El equipo brasileño eliminó en esta Copa a Ponte Preta en la fase previa y en octavos de final a Libertad de Paraguay.
Frente a River se enfrentará el 21, en el estadio Monumental y el 28 de octubre, en Chapecó, en busca de las semifinales.
Independiente enfrentará a su homónimo colombiano, Santa Fe de Bogotá, que fue campeón 12 veces en su país. Si bien no es un equipo chico, no tiene laureles internacionales como Atlético Nacional, América de Cali u Once Caldas, con historial copero.
Defensor Sporting enfrentará a Huracán en los cuartos de final.
Huracán chocará en cuartos frente a Defensor Sporting, cuatro veces campeón del fútbol uruguayo, pero muy lejos de la chapa que le darían al certamen Peñarol o Nacional, los grandes del otro lado del charco. Eliminó a Lanús, por penales, en la serie de octavos.
A la vez, Atlético Paranaense de Brasil y Sportivo Luqueño de Paraguay, dos equipos poco populares en sus respectivos países, podrán tener su chance de seguir a la fase final.