El partido se picó fuerte. Después del primer gol de Países Bajos, la tensión comenzó a palparse con fuerza dentro del campo de juego y, pese a las estrictas órdenes de Lionel Scaloni de "no entrar en el juego" (él también se llevó una amarilla), fueron muchos los jugadores de la Scaloneta que no pudieron contener su bronca frente a las patadas y los gestos del cuerpo técnico del rival.
Uno de los primeros en picarla un poco fue Lionel Messi, que no dudó en celebrar el segundo gol argentino mirando directo al técnico rival. Le sumó, cual Román Riquelme, un gestito de idea; lo que le valió que el asistente de Van Gaal, Edgar Davids, lo fuera a buscar después del encuentro mientras "La Pulga" brindaba una entrevista.
Atento a lo que sucedía detrás de cámara, el capitán argentino se paró de manos y le espetó en vivo: "¿Qué mirás, bobo? ¿Qué mirás, bobo? Andá, andá para allá; bobo. Andá para allá". La agónica victoria de la Argentina y el pase a la semi ante Croacia no calmó al diez y se notó también en sus furiosas críticas al árbitro del partido.
"Estaban calientes todos los jugadores argentinos con los de países bajos. Los cargaron durante todo el partido. Lo que le enojó a Leo de Van Gaal fue lo que dijo, de que Argentina jugaba con 10 por jugar con Messi. El otro se acercó con la camiseta, pero fue para el 19 de países bajos (Weghorst). El autor de los dos goles", explicó luego el cronista Gastón Edul, quien entrevistaba al astro al momento del cruce.
Durante el encuentro Leandro Paredes también dio la nota. Después de dos planchazos (el último con amonestación), el jugador descargó su bronca tras el empate rival con un pelotazo directo al banco de suplentes de Países Bajos; lo que dio lugar a que los suplentes ingresaran de forma intempestiva a la cancha y casi se fueran a las manos.
Otro que se descargó fue el "Dibu" Martínez. Después de atajar los dos primeros penales y quebrar así psicológicamente a los jugadores rivales, el arquero protagonizó otro incidente tras el festejo.
"I fucked you twice" (para ser generosos, podemos decir que la traducción más livianita es: "Te hice dos veces el amor"), le gritó a un holandés que lo quiso apurar tras quedar fuera del Mundial, al tiempo que le sumó un repudiable: "Put... de mierda".