11 Octubre de 2017 07:39
No vamos a ver el gol de Ecuador. No habíamos llegado al minuto de juego y nos queríamos matar. Co Ca Co la-gol. ¿Qué pasa, nos están jodiendo? No, no lo vamos a ver. Porque ya pasó, ya fue, ya saben lo que pueden hacer con él. Vamos a ver, en cambio, los tres goles del mejor del mundo que nos depositaron en el Mundial de Rusia después de tanto sufrimiento. ¿ Te parece bien? Vamos con el primero.
El primero
Combinación con Di María. Leo se la da, Fideo se la devuelve. Gol de Messi. Gol del máximo goleador de la Selección argentina. Gol del máximo goleador de las eliminatorias. Bien ahí. Ahora bien, con un gol solo, ¿qué hacemos? Necesitamos otro, Leo.
El segundo
Otra vez la sociedad que extrañábamos. Di María para Messi, el defensor ecuatoriano Aimar pone la pierna livianita, Leo se lo lleva puesto, levanta la cabeza y adentro. Segundo. Golazo. Ya estábamos adentro. Esa. Gracias Capo.
El tercero
Di María se abre buscando la descarga. Messi lo tiene como opción de pase, por eso juega tranquilo. Viene casi caminando con la pelota por el borde de la medialuna. De pronto, cambia de velocidad, pone la quinta en un segundo, desaira a Robert Arboleda, el 3 ecuatoriano, y adentro con sutileza. ¿Cómo se llama esto? ¿Vaselina, emboquillada? Se llama golazo, se llama 3-1, se llama listo el pollo, se llama vamos a jugar el Mundial, se llama zafamos, se llama ahora sí, Sampaoli laburá tranquilo y a ver si ahora sí dejamos de ver los nostálgicos videos del 86 y empezamos a escribir una nueva página de gloria. Cruzamos los dedos y celebramos que el mejor del mundo juega para nosotros.
